Fenix ~ Los Juegos del Hambre

⚔Capitulo 13: El rescate

-¿Como llegaron a eso? -pregunto Katniss con curiosidad viendo como Helena se empapaba en las olas mientras Finnick masacraba la arena con su tridente- A esa unidad, a tener hijas...

-Helena Heavensbee... -soltó Johana con voz presuntuosa antes de reír secamente- La odiaba al principio -declaro sorprendiendo Peeta y a Katniss- Creí que lo tenia todo, familia de vencedores, padre vigilante de los juegos, pero luego la conocí y me enamoro la desgraciada -confeso atrañendo ceños fruncidos- No de esa manera iguh, como persona.

-¿A Finnick le paso lo mismo? 

-Oh no él cayo redondo ante ella -ríe con gracias recordando como atrapo al gran Finnick Odair acosando a lo lejos a la hija sensación de un vigilante en jefe, cuando esta era una adolescente- Desde que la vio se enamoro de ella.

-¿A que te refieres? -preugnto Peeta interesado.

-No se si ella lo recuerda pero en la gira de Finnick ella fue la encargada de darle flores en la bienvenida al distrito, su familia era importante y el alcalde no tenia hijos asi que...

-¿Y ya? -prugnto Katniss ante el silencio d ela pelirroja.

-Finnick quedo embobado, pero Lena no parecio notarlo hasta una fiesta de mascaras poco antes de que fuera enviada a la arena -resumió la pelirroja- Luego el la enamoro y vivieron felices para siempre.

-¿Enserio fue tan fácil? -pregunto Peeta incrédulo y la pelirroja se mofo de él.

-No, Ella también cayo, ninguno lo admitía aunque Haymitch ayudo -suelta volviendo a sorprenderlos sin dar muchos detalles- Peleaban se besaban y volvían a pelear hasta que no se algo paso, adoptaron a las niñas y ahora son así... El amor es extraño -murmura volteando a ver como Finnick dejaba su ataque de ira en cuanto Helena tomo su mano y solo se apoyo en su hombro en completo silencio.

-Tengo un plan, ¡Helena, Finnick! -grita Beetee a nuestras espaldas y sorbo mi nariz a la par que siento a Finnick tensarse.

-No sé si alguna vez podré olvidar lo que escuché -confieso aun con voz rota- Me atormenta pensar en lo que pudieron estar pasando...

-Tu padre no lo permitiría -interrumpe en un susurro abrazándome con más fuerza, apretándome contra él como si pudiera absorber parte de mi dolor- Fue una trampa del Capitolio, una tortura psicológica para quebrarnos -declara tratando de convencerse y suspiro.

-Ya no puedo mas Finn quiero ir a casa, quiero ir con ellas -lloriqueo aferrándome a su brazo.

-Eres más fuerte de lo que crees, y siempre estaré aquí para recordártelo, volveremos -promete mirándome fijamente- Lo prometo, ahora vamos, hay que ejecutar un plan para sacarnos de aquí -anima tendiéndome su mano para ir hacia los demás.

-No debí hacer esto... -susurro para mi misma antes de llegar ante nuestros compañeros con la mano reconfortante de Finnick acariciando mi espalda.

-¿Donde se sentirían seguros los profesionales? -pregunta el de lentes mirándonos.

-La jungla es horrible -murmura la pelirroja colocándose a mi lado y sonreí de lado por su apoyo.

-En la playa -respondemos Finnick y yo.

-Exacto, ¿Por que no están aquí? -continua retóricamente y ruedo los ojos.

-Por que estamos nosotros -respondo obvia y este asiente.