The Boyfriend game

Capitulo 38

La entrenadora Merrill sopló su silbato para que hiciéramos una vuelta de calentamiento alrededor del campo, y nos quedamos juntas en la parte trasera.

Sara me golpeó con el hombro. —¿Y? ¿Qué está pasando?

Yo apreté los labios y sacudí la cabeza. —No quiero hablar de ello. —En realidad quería hablar sobre ello, pero yo estaba demasiado enfadada por su traición para decirles. Quiero decir, sí, ella se había disculpado, pero no era suficiente. Todavía estaba enfadada. Así que aceleré y me fui detrás de ellas, oía susurros detrás de mí.

No me importaba.

Después de unos segundos, me alcanzaron de nuevo.

—Por lo tanto, vamos a permanecer y practicar contigo esta noche —anunció Sara.

Solté un bufido. —Es la noche del jueves. La noche de Pop's. Tú nunca te quedas hasta tarde los jueves, sobre todo ahora que tienes novio.

—Nos vamos a quedar —dijo Sara firmemente—. He estado saliendo con la entrenadora Merrill y escucha, yo sé que el segundo lugar está entre tú y Kathleen. Y sé lo que es tu debilidad, y sé lo que es tu fortaleza. Y yo puedoayudarte a mejorarlo esta noche.

Yo era completamente incapaz de detener la esperanza que me quemaba en el pecho. —Oh, vamos.

Ella me agarró del brazo y tiró de mí para pararme, así que estaba frente a ella. —Me quedaré aquí toda la noche si eso es lo que se necesita para ayudarte a hacerte universitaria. Te lo debo.

Yo la inspeccioné. Ella me miró seriamente. —¿Tú eres la número uno?

—Sí, pero si no lo haces, voy a abandonar para que puedas tener mi lugar. —Puso su mano sobre su corazón—. Juro por la tumba de agua de mi pez de colores muerto Herman que voy a abandonar, si yo lo hago y tú quedas en tercera posición.

Eso me llamó la atención. Estaba muy grave para invocar a Herman. —¿Pero yo pensé que acababas de decir que te diste cuenta que querías ser universitaria?

—Lo hago, pero te lo debo. Voy a abandonar de inmediato si es necesario. Lo juro por Herman.

La miré, el ardor de mi garganta estaba disminuyendo. Me di cuenta de que Sara era completamente seria en lo mucho que quería ser universitaria, y ella estaba dispuesta a jurar a Herman su sitio por mí, si se reducía a eso. Asentí con la aceptación de sus disculpas. —Gracias.

—Por lo tanto, ¿estoy perdonada?

Asentí con la cabeza. —Sólo a causa del juramento a Herman.

Beth dio un pequeño grito de alegría y lanzó sus brazos alrededor de las dos. —¡Voy a extrañarlas tanto chicas cuándo ambas estén en el equipo universitario!

La abracé hacia atrás, y a Sara también. —Vosotras sois las mejores. —Les dije—. Incluso si os odié a principios de semana.

—Lo mismo —se rió Sara.

La entrenadora Merrill sopló su silbato. —¡Chicas! ¿No se supone que deberíais estar corriendo?

Nos reímos y empezamos a correr de nuevo, irremediablemente detrás del resto del equipo. Y por primera vez desde el sábado, me sentí mejor.

Pero todavía no podía dejar de mirar el campo de Liam después de la práctica para ver si él estaba allí.

Él no estaba. "Nuestro" campo estaba vacío.

Durante toda la semana, yo pensé que todavía estaba allí, practicando. Esperando que me fuera a presentar.

Pero no lo estaba. Yo lo había cortado, y él me dejó.

Ahora era oficial entre nosotros. A pesar de que ya no éramos amigos.

Y me sentí como si mi corazón se me fuera a romper.