The Boyfriend game

Capitulo 28

Quité la mirada del choque de trenes en la parte posterior de la habitación y miré a Harry. ―¿Qué?

—¿Estás bien? Te ves un poco extraña.

Tomé una respiración profunda, que era totalmente inestable. —Estoy bien.

Deslizó la jarra y un vaso con hielo hacia mí. —Ese es el tipo de la práctica de futbol, ¿no?

—Uh huh. —Apunté hacia el vaso y logré verter el refresco sin derramar todo sobre la mesa. ¿Liam estaba todavía con Ashley? ¿Estaba su brazo alrededor de ella? Tenía que saberlo. Yo tenía que saber. Me rehusé a girarme.

—Así que, bueno, él sigue mirando hacia acá —dijo Harry.

—¿En serio? —Sonreí, pero no miré a Liam. De ninguna manera me pillaría mirándolo.

Harry se recostó en su asiento. —Por lo tanto, tú dijiste que no estabais saliendo, pero eso no es verdad, ¿no?

Solté un bufido. —Ah, es verdad. —Tomé un largo trago de refresco y miré hacia el lado donde estaban sentados, tratando de ver a Liam. ¿Era esa su mesa? ¡Sí, sí lo era! ¡Justo!

Entonces mi instinto se hundió. ¿Estaba realmente su brazo en la parte posterior de la silla de Ashley? ¡No puede ser! Debe ser una distorsión por la posición.
Miré a Harry.

—¿Está su brazo alrededor de la parte posterior de la silla de esa chica?

—Sí, lo está.

Apreté los labios y mis manos sobre mi taza.

—Así es como está. —Él parecía resignado.

Me quedé mirando las pequeñas burbujas en la superficie de mi refresco, observando cómo emergían una a una. No voy a mirar a Liam.

—¿Cómo es esto?

—Tienes una mirada de enamorada hacia él.

Tiré mi mirada hacia Harry. —¿Qué? ¡De ninguna manera! Ja. ¡Eso es totalmente estúpido!

Levantó las cejas.

Levanté la mía derecha de nuevo.

Por un momento, tuvimos un concurso de levantamiento de cejas, después sonrió.

—Tú ganas. Me está dando dolor de cabeza.

Él sonrió y bajó sus cejas. —Por lo tanto, ¿estabas diciendo la verdad en el campo ese día, cuando dijiste que no estabas interesada en mí?

Me encogí de hombros.

—Huh —él se movió en su asiento—. Así que, tal vez debería quitarme de en medio entonces, antes de que lleguen los demás.

Empezó a deslizarse fuera del asiento y yo le agarré la muñeca. —¡Espera!

—_____(tn)...

—¿Qué piensas de Sara?

Me miró sin comprender. —¿Sara? Ella está bien, supongo.

—Pero, ¿ella es guapa?

Arrugó la frente levemente. —Bueno, sí. Por supuesto.

Oh, ella me va a matar por esto, lo sé. —A ella le gustas.

Se me quedó mirando con los ojos muy abiertos. —¿Qué?

—Mira, esa es la razón por la que nunca pensé en ti como hombre. ¡No pude! A ella le has gustado desde siempre y nunca le haría eso.

Se recostó en el asiento con un golpe, me miraba.

—Estás bromeando. ¿Sara? Pero ella es tan coqueta. No pensé que quisiera decir algo...

—Ella es así solo contigo. —Puse los ojos en blanco—. En serio Harry, dale una oportunidad. En realidad es muy normal. Ella sólo lleva extensiones porque le gustas.

—Wow —él se frotó la barbilla, con una expresión pensativa en su rostro—. Wow.