Chapter Forty Six: Farewell, dear Matt.

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Cuando nos apartamos uno del otro sin romper por completo el contacto observo como sus ojos azules brillan con un destello de felicidad que nunca antes había visto en él

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Cuando nos apartamos uno del otro sin romper por completo el contacto observo como sus ojos azules brillan con un destello de felicidad que nunca antes había visto en él. Era como si las estrellas resurgieran en el cielo azul; tan brillante e hipnótico. Acarició mis mejillas suavemente con la yema de sus pulgares.

Su cabello estaba más largo y tenía una barba de cuatro días. Se veía cansado con sus ojos más hundidos, como si no hubiese dormido en semanas y todo el cansancio se hubiera acumulado aunque era algo irónico pues, se que ellos no dormían. Pese a esto, podía ver que era diferente, como si estuviera en calma y lo que lo atormentaba hubiese sido soltado.

—Estas bien —me dice con una sonrisa mirando cada rincón de mi cara a lo que asiento en respuesta.
—¡Nick! Tiene que verte —recuerdo con apuración y este solo suelta una risa por lo bajo.
—Fue al primero que vi. Creí que te encontraría en la casa y él me hizo saber que estarías aquí. Me da mucho gusto verte como antes...temí que no regresarías. —hace una pausa y baja la mirada a sus pies— Perdóname —se disculpa.
Junto mis cejas pues no entiendo qué es lo que siente.
—¿...Chris?
—Todo. No hubo un día en el que no pensara en ti y en lo que te hicimos. Lo siento tanto, Theo —me expresa con arrepentimiento.
—Todo está bien —le trato de decir en un tono suave haciendo que vuelva a elevar el rostro hacia mi cara.
—No, Theo. Necesito que me escuches. —me pide casi en suplica a lo que me mantengo en silencio prestándole mi atención. Lo que sea que necesite decirme, debo dejarlo de lo contrario, sería como reprimir sus sentimientos— Todo esto que sucedió, me hizo comprender que la vida a nuestro lado es sufrir. Siempre estuve seguro que jamás perdía a Matt o Nick y eso me hacía sentir confiado. Tal vez mi única preocupación era que ellos sufrieran emocionalmente pues, en eso yo no tenía control. Luego te conocí y no es fue amor a primera vista como en la literatura y esa mierda de películas románticas... —aclara a lo que me hace esbozar una sonrisa débil divertida ante su manera de decirlo— pero te fui conociendo y sin darme cuenta, comenzaste a caerme bien. No quería encariñarme pero fue difícil ignorar la tristeza, la alegría o el dolor que veía en ti. Sabía que amabas a mi hermano y yo comencé a respetarlo e incluso a valorar lo que estaba dispuesta hacer con tal de volverlo a ver. —hace una pausa y prieta sus labios intentado calmar su voz y sus pensamientos antes de soltar un suspiro y proseguir— Simplemente comenzaste a gustarme —confiesa y niega con la cabeza como si fuera difícil aceptarlo—. Esa compañía y el cariño que ofrecías a Nick y a mi solo porque Matt nos quería fue uno de los aspectos que me hicieron ver por ti también. Todo lo que hice y la manera tan idiota en la que me comporté contigo fue porque solo me importaba Matt. Mi único propósito era encontrarlo y saber que estaba bien a costa de tu vida o seguridad. Después comenzaste a importarme y comencé a temer porque sabía que a ti si te podría perder en un segundo. Tu dolor comencé a sentirlo como mío. Y entonces supe que estar a nuestro lado era empujarte hasta el límite. Cuando colapsaste en el bosque — dice y vuelve a pausar para morder sus labios ante la dificultad de expresar las siguientes palabras— Tuve un enorme miedo que llevaba años que no sentía. El mismo sentimiento que cuando supe que Matt había enfermado. Pensar que te perdía fue como flotar en la desesperación y la nada. Nunca antes me había sentido tan débil al considerar la muerte.

CHANGES [Matt & Chris Sturniolo] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora