Chapter Nine: It had been a while since I felt...normal.

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Cuando desperté, lo primero que pensé fue que todo había sido una pesadilla. Me levanté de un tirón escuchando a lo lejos aquel gruñido hueco saliendo de la oscuridad. Me pregunté si aquella noche había sucedido en realidad o si simplemente fue parte de mi mente. Me despabile y tratando de que las escenas se disiparan como todos los sueños cuando despertamos, comencé mi rutina para irme a la escuela. La sensación de inquietud aunque ya no la sentía como ayer, permanecía. A la luz del día la casa vieja y abandonada se veía diferente que en la oscuridad, y entonces me cuestione si en realidad había pasado. Ahora se veía como un escenario producido por mis miedos y subconsciente. ¿Pero qué cosa había sido real y que otra no?
Restregué mi mano sobre mi rostro. Aunque hubiera dormido toda la noche era como si mi mente no hubiera podido descansar en todas esas hora. Era como estar y no estar despierta al mismo tiempo. Ser consciente que duermo mientras mis ojos aún se encuentran cerrados. Sabía que el cansancio me alcanzaría a mitad de alguna clase, si es que no me quedaba dormida en el trabajo. Cuando llegué a mi casillero en vez de abrirlo, pegue mi frente sobre la puerta metálica mientras cerraba mis ojos si entiendo la pesadez. No iniciaba ni una clase y la pesadez ya me estaba llegando.
Solté un suspiro hasta que sentí como alguien tocaba mi hombro. No era mi intención precipitarme y exaltarme pero mi cuerpo solo reaccionó por inercia al contacto inesperado. Matt me analizó de arriba a bajo con su mano en signo de rendición.
—No era mi intención asustarte —se disculpó.
—Lo siento...yo no... —trate de explicarme— Solo descansaba un poco.
—Creo que más bien dormías en el pasillo —bromeo pero al no tener la reacción que él esperaba, su sonrisa se desvaneció— ¿Te pasa algo? ¿Llegaste bien a casa ayer? —me preguntó.
—Si, mhm... Llegué bien —dije insegura pues no tenía idea si lo que decía era la verdad o no.
—No luces convencida. No sé porqué no me permitiste acompañarte. —me reprocha— ¿A caso aquel hombre...?
—No. —me precipité a responder antes de que terminara la pregunta. Mi cabeza estaba echa un lío, pues si le respondía confirmando sus dudas, sería como afirmar a una situación de la que no estaba segura si había sucedido o no. Tal vez nada de anoche había pasado y yo estaría creando una situación que nunca pasó.
Era extraño porque nunca había pasado que llegara un punto en el que dudara de lo que era real y no. Matt me miró con sospecha como si supiera que estaba mintiéndole,  sin embargo, no protestó. Bajó la mirada como si estuviera apenado y soltó un suspiro.
—A la próxima déjame acompañarte —me dijo casi en una suplica.
Como si hubiese estado ahí y reafirmara que mi temor había sido real. Solo asentí dibujando una débil sonrisa y fue hasta ese momento que me dispuse abrir mi casillero.
—Sabes, creo que le agradas a Maddie —le comenté para cambiar el tema.
—Es agradable —respondió y no fue lo que yo esperaba—. Tú también eres agradable —agregó y eso fue a un peor pues aunque Maddie nunca había sido grosera conmigo, pero no era el tipo de persona de la que sería amiga.
—Tu también eres agradable —fue lo único que pude decirle.
Matt río e hizo su cabello hacia atrás con su mano.
—¿Por qué de pronto mencionaste a Maddie? —me preguntó y enarcó una ceja.
—Porque te busca mucho. Creo que le gustas. —dije como si no me importara.
Al no tener respuesta de su parte, lo miré y su silencio tan solo me confirmó que él lo había deducido solo que no deseaba expresarlo en voz alta. Lo que quería saber era si, a él le gustaba ella. O alguien.
Y como si la hubiese llamado, note como Maddie se acercaba detrás del castaño con una gran sonrisa dispuesta acercarse a él como se estaba haciendo costumbre. Era como si cada vez que estábamos juntos, nuestro tiempo se recortaba. No sabía como explicarlo pero era como si, sin darme cuenta una corriente fuerte se lo estuviera llevando cada vez más lejos. Él regresaba, claro, pero presentía que en algún punto no lo haría. 
Me apresuré y cerré mi casillero con la intención de irme antes de que la morena llegara. Dibuje una sonrisa de despedida.
—Te veo luego —dije y este sonrió como si supiera lo que estaba a punto de hacer, entonces se alejó del casillero y comenzó a caminar con intenciones de acompañarme.
Me confundí un poco pues no sé si fue consciente o no de que Maddie se acercaba, pero yo tampoco hice algo por avisarle. Simplemente lo miré mientras ambos nos alejábamos del pasillo para ir a clases. Me da un leve codazo en mi brazo a lo que yo le devuelvo el gesto sonriendo. Por momentos como estos me hace ver un lado más juguetón de él, como un pequeño niño pasando el rato molestando a sus amigos. Me preguntó si así se llevaba con sus hermanos y si es que no extrañaba hacer cosas con ellos. Quería creer que tal vez, solo tal vez, mi compañía lo hacía sentir menos solo. Él me hacía sentir como una adolescente sin problemas; viviendo mi vida como una chica con problemas de alguien de nuestra edad. Me habría gustado que fuera la última persona en saber la verdad de mi situación familiar pero a la vez agradecía tener a alguien que me entendiera y me apoyara. Y cada vez conforme lo conocía, mas me gustaba. No creía poder decírselo, porque añoraba su compañía más que nada y temía que si en algún punto se lo confesaba, podría arruinarlo y lo último que deseaba era que nos distanciáramos. Si él quería una amiga, yo continuaría siéndolo hasta cuando él quisiera.

—¿Qué tipo de música te gusta? —le pregunté y este elevó su mirada del Wolkman a mi rostro.
—¿Mis gustos? —me responde con otra pregunta. Asentí y este se mantuvo en silencio por varios segundos pensando antes de proseguir— Es algo raro, por la manera en la que la música ha evolucionado con el paso de los años. Uno pensaría que por estar acostumbrados a escuchar un género en particular por muchos años no disfrutaríamos de los nuevos que surgen con el paso del tiempo. —dice con la mirada perdida y una débil sonrisa— Antes solía escuchar música clásica. Me gustaba tocar el violín y el piano. Eso escuchábamos en casa porque a mi madre le encantaba tocar y a mi padre y a nosotros escuchar. Con el paso de los años comencé a escuchar diferentes géneros como el Jazz, el Blus, el Rock n' roll, el disco, el rap, dance, el grunge, etc. me gusta de todo en realidad. Creo que tengo un gusto muy variado —responde al fin regalándome una sonrisa sincera.
—Has dicho que tocabas el violín y el piano ¿Ya no? —le pregunto y este niega.
—Hace años que no lo hago.
Quise preguntar por sus padres, pero no me atreví pues la manera en la que él lo hizo fue hablando de ellos en tiempo pasado, no tenía idea si se debía a que ambos ya no se encontraban vivos o simplemente fue un error al referirse de ellos. Lo único que sabía es que Matt parecía haber tenido una linda familia a la que añoraba. Incluso mencionó a sus dos hermanos. Supongo que fueron buenos tiempos, más no sé qué habrá pasado como para que se distanciara de ellos.
Yo no conocía de música clásica porque nunca me había interesado. Me sorprendía un poco qué él lo disfrutara. No conocía a muchos chicos de mi edad que conocerían o reprodujeran por gusto música clásica, pero era bueno saber para poder escudriñar entre los discos de la tienda de música donde trabajaba Will, si había. Solo era cuestión de preguntarle a mi amigo.
—Disfruto escuchar tu música —me hace saber—, hay varias que no conocía. A ti también te gusta de todo —señala.
—Disfruto de todo. ¿Te imaginas que alguien no le guste la música?
Él abrió los ojos como si acabara de decir algo descabellado y negó. Su reacción fue muy graciosa.
—No he conocido a alguien que no le guste la música.
—¿En tu otra escuela tenias muchos amigos? —le pregunto y este borra la sonrisa.
—No era muy sociable —responde y pasa sus manos sobre su cabello— Por muchos años fuimos mis hermanos y yo, que hubo un punto en el que dependí mucho de ellos —cuenta con la mirada en el reproductor de música que sostienen sus manos—, no sabía estar solo y cuando lo estuve fue difícil pero necesario. Me costó adaptarme de hecho.
—Aún cuando dices que no deseas verlos, cuando hablas de ellos parece que los extrañarás —me atrevo a decir con una débil sonrisa— Eso significa que pese a estar molesto aún los quieres.
Matt eleva su mirada para después bajarla y negar suavemente con la cabeza.
—Tal vez, pero es mejor alejarse antes de que te arrastren a un pozo sin salida. Creo que en eso tú yo somos iguales.
—La diferencia es, Matt, que yo nunca tuve familia y tú sí. Yo no añoro el pasado porque nunca hubo alguien a mi lado mientras que tú... —hago una pausa. Matt me mira y le regalo una sonrisa compasiva— tenías a dos. No tengo idea del problema que habrá pasado entre ustedes pero se que en el fondo quisieras una oportunidad, o una excusa para saber de ellos. Tienes tus motivos pero de lo que estoy segura es que así como tu los extrañas en tu interior ellos también a ti.
—Tal vez tengas razón, pero yo jamás habría llegado aquí y no te habría conocido. No me había sentido tan...normal desde que cruce esa puerta y hablé contigo. Había olvidado lo que era sentirme así —confiesa a lo que de inmediato siento un cosquilleo en mi estómago. Me sorprende saber que ambos compartimos cierta similitud por la compañía uno del otro— Cuando te digo que estoy bien, es porque en serio me siento bien desde que me mude a este lugar. Eres la primera amiga que tengo en mucho tiempo —expresa y por extraño que parezca, me da la impresión como si se refiriera a un periodo largo y no a unos años atrás.
A veces sucedía que cuando hablaba con él, sentía que en los momentos en que se refería a los sucesos, lo hacía en un doble sentido, como si fuera cierto y al mismo tiempo no. Era extraño, tal vez yo analizaba mucho lo que él hacía o decía pero, no podía evitar sentirlo así. Muy en el fondo sabía que pese a compartir mucho tiempo juntos y tener largas conversaciones uno del otro, yo aún no sabía absolutamente nada de él.

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Antes que nada muchas gracias a las personas que se toman su tiempo y le dan una oportunidad a esta historia. Me hace feliz saber que estén disfrutando de los capítulos, además quisiera agradecer aquellas personas que se toman su tiempo en comentar, no saben lo mucho que lo aprecio. Le dije a una de ellas que para este día subiría dos capítulos seguidos, y como lo prometí, aquí están. Eso significa que  el siguiente lunes 17no subiré hasta el  lunes 24. En serio muchas gracias 🖤✨

CHANGES [Matt & Chris Sturniolo] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora