EL TIEMPO ENTRE NOSOTROS (Ben / Mitchell Hope y Tú) Descendientes

HECHIZANTE:

 Narra Mal:

 Me levante de la cama muy a mi pesar, ya que hoy debíamos poner en marcha el plan que teníamos en mente, con la desvelada de ayer para hacer la galleta no había logrado conciliar muy bien el sueño, además de que Lonnie me había dejado mucho en que pensar. Después de bañarme y cambiarme, y de esperar que Evie terminara de arreglarse salimos rumbo a los casilleros, hoy había un partido importante para la preparatoria, por lo que esperábamos encontrarnos con Ben a inicios del día, ya que es el capitán del equipo de turney, afortunadamente para nosotros fue así.

 Yo me encontraba esperando en los baños que se encontraban a un lado de los casilleros en la parte trasera del instituto, estaba espiando y esperando a que pasara Ben, no tuve que esperar tanto cuando escuche la voz de Audrey acercándose.

-Se lo hizo al cabello de Jane y el Hada Madrina está furiosa –comento parándose junto a los casilleros.

-No tiene nada de malo –respondió Ben, con cierto aire divertido.

-¡Es un tipo de magia!, si, empieza con el cabello... Luego te descuidas y son los labios y las piernas y la ropa, y luego todas se verán bien, y entonces... ¿Qué pasara conmigo?

-Escucha Audrey...

-Te veré en el juego para después irnos a probar el vestido para la coronación –dijo ella interrumpiéndolo.

-Ok –respondió el riendo.

-Adiós Bennybu.

 Muy bien, era mi momento, ahora o nunca.

-Hola Bennybu –dije imitando el tono jocoso de Audrey.

-Hola –respondió Ben un poco sorprendido.

-Hoy preparé galletas con muchas chispas –dije iniciando la conversación.

-Eh no, hay un juego importante y nunca como antes... Pero gracias, muchas gracias, gracias... Otro día... Otro día –respondió el inmediatamente rechazando mi invitación, tendría que ser más insistente.

-No si, entiendo lo que te pasa... Cuidado con las galletas que te ofrecen los villanos.

-No, no, no.

-Todos saben eso en Auradon, claro.

-No, no, no... No es eso no, no... Es solo que el juego...

-No entiendo, eres listo, comprendo... –dije interrumpiéndolo, victimizándome y tomando una galleta de la bolsa como si fuera a comerla- Esta bien, más para mí, creo.

-No, no, no, ¡hey!, ¿ves?, yo creo en ti... ¡Te creo!

 ¡Bingo! Había caído en la trampa, me había arrebatado la galleta de la mano y justo en ese momento se encontraba comiendo la golosina hechizada.

-¿Te gustan? –pregunte mientras le hacia la seña a los chicos para que se acercaran.

-Sí, es genial... Deliciosa... Asombrosa... Esta muy crocante, y tiene algo, ¿son nueces?... Amo las nueces, me refiero a que... Digo, el chocolate... El chocolate... Las chispas de chocolate... –¿pero que estaba diciendo?, ni siquiera logro entenderle, ¿estos son efectos secundarios de la galleta?, de ser así, espero que se quiten- Lo lamento... Están tibias y suaves, y son dulces... Mal, ¿has tenido siempre esos reflejos en los ojos?

-Ok –dije retirándole el trozo de galleta que le quedaba, me parece que ya ha comido bastante.

-¿Cómo te sientes amigo? –pregunto Jay llegando y abrazándolo por los hombros.

-Me siento... Siento ganas de cantar tu nombre, ¡Maaal, Maaal!

 Todos quedamos sorprendidos ante esa actitud, así que este es el poder del libro de hechizos de mi madre, después de todo si está sirviendo de algo, es más poderoso de lo que había imaginado.