Capítulo 34: Noches y sonrojos

30 2 0
                                    


El sol de la mañana se filtraba a través de las cortinas, iluminando suavemente la habitación donde Satoru yacía, todavía sumido en el calor del momento de la noche anterior. Al girar la cabeza, su mirada se posó en Lisa, quien aún dormía a su lado, su expresión tranquila y satisfecha. Habían compartido una noche intensa, una que había dejado a Lisa exhausta, y ahora, su respiración suave y relajada era un claro testimonio de la pasión desbordante que habían compartido.

Después de algunos minutos, Satoru notó un leve movimiento. Lisa empezaba a despertar, sus pestañas revoloteando ligeramente mientras abría los ojos. Al verlo, una sonrisa perezosa y contenta se dibujó en su rostro.

Lisa: —Con una voz aún somnolienta— Buenos días... ¿Ya amaneció?

Satoru: —Le devuelve la sonrisa— Sí, pero no tienes que moverte. Relájate.

Lisa: No, esta vez me gustaría hacerle el desayuno a mi amado.

Lisa intentó levantarse, pero sus piernas temblaron, y terminó cayendo de nuevo sobre la cama, un leve rubor cubriendo sus mejillas.

Lisa: Creo que... fui demasiado optimista sobre poder levantarme.

Satoru: —Bromeando mientras acaricia su cabello— Tal vez te excediste anoche

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Satoru: —Bromeando mientras acaricia su cabello— Tal vez te excediste anoche. Aunque diría que ambos lo hicimos.

Lisa: Mas bien tu. Pero no me desagrado, al contrario me encantó.

Lisa soltó una suave risa, pero había una determinación en sus ojos.

Lisa: Aunque debo ir a la biblioteca... hay cosas que hacer.

Satoru: —Con un tono firme pero cariñoso— De eso me encargaré yo. No te preocupes, tú descansa. Ahora bajaré a preparar el desayuno.

Lisa: Te amo satoru.

Satoru: Yo también te amo.

Ambos compartieron un beso que reflejaba en acciones todos sus deseos.

Lisa lo observó mientras se levantaba de la cama, su figura aún ligeramente adolorida, pero sus ojos brillaban con una mezcla de afecto y agradecimiento.

Lisa: Siempre tan considerado.

Comentó en un tono medio burlón, medio cariñoso, mientras él se dirigía hacia la puerta.

Satoru solo le dedicó una sonrisa antes de salir de la habitación, dejando a Lisa envuelta en las sábanas, su mente rememorando los momentos de la noche pasada.

Aunque sabía que debía ir a la biblioteca, el simple pensamiento de moverse la hacía estremecerse. Aún así, la presencia de Satoru y su ofrecimiento para encargarse de todo la tranquilizaban.

Pasaron varios minutos antes de que Satoru regresara, trayendo consigo una bandeja con un desayuno cuidadosamente preparado: tostadas, frutas frescas, jugo de naranja y una taza de té caliente, perfectamente a su gusto. Al verlo entrar, Lisa esbozó una sonrisa cálida, su corazón palpitando suavemente al recordar lo que habían compartido.

SATORU x Genshin Impact Pt 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora