Después de aproximadamente una hora de la sesión de fotos donde no paraba de estar abrazada de Camero y él ni intentaba soltarme, no podía negar que me gustaba, me sentía cómoda en sus brazos aunque un poco avergonzada por la cantidad de personas que había aquí.
-Última foto. –dijo Bryant enfocándonos, sonreí mirando a los ojos a Cameron, que no dejaban de mirarme con ese brillo especial de sus ojos, escuchamos el sonido de la Cámara y volteamos.
-Ya está. –dijo Bryant bajando la cámara. –Son los mejores, las fotos están hermosas.
-Ahora queda elegir cuál de todas las fotos ira en la portada. –Hablo Gina, acercándose hacia Bryant.
Bryant nos mostró las imágenes, la verdad todas estaban bonitas, pero había una que me gustaba más.
Salíamos mirándonos a los ojos, el agarraba suavemente mi cintura mientras que yo jugaba traviesamente con su cabello, y nuestros labios rozándose apunto que comerse a besos.
-Esa me encanta. –señaló Cameron la misma foto que a mí me gustaba.
-A mí también me encanta esa. –sonreí mostrando los dientes.
-Entonces será esa. –dijo Bryant asintiendo.
-Bryant, esas fotos pueden estar para mañana, es que quiero que salgan en la edición de mañana. -le preguntó Gina a Byrant.
-Claro. –afirmó. –Solo tengo que editarlas un poco y están listas para mañana.
-Cameron. –dijo su mamá llamando su atención.
-¿Pasa algo?. –le preguntó.
-¿Podemos hablar?. –le preguntó su mama con un tono no tan seguro, la verdad no entendía lo que pasaba pero empezaba a asustarme.
El asintió y camino hacia Gina, antes de pasar por mi costado, me dedico una sonrisa segura y suspire pesadamente.
Narra Cameron
No entendía por qué mi mamá empezaba a hablarme de esa forma, vi fugazmente a (tn)___ que estaba frunciendo el ceño confundida pero podía ver que estaba un poco asustada y no podía negar que yo también lo estaba.
Caminé hacia mi mama decidido hasta que me llevo a una esquina del camerino.
-Ahora sí. –hice una pausa. –Dime que es lo que me tienes que decir.
-Hoy, tus hermanastras vendrán de London. –dijo mi mamá mirándome a los ojos.
-¿Hermanastras?. –fruncí el ceño, pero después recordé quienes eran. -¿Y por qué diablos van a venir?.
-Tu papá ha querido traerlas, ya sabes hace tiempo que no las vez.
-Mamá, no las veo desde hace. –conté con mis dedos. –más de cinco años.
-Bueno ya te lo dije, llegaran hoy a las cuatro y quiero que les des una buena bienvenida. –respondió mamá cruzándose de brazos.
-¡¿Por qué hoy?!. –exclamé fuertemente. –Tengo planes. –quería llevar a (tn)___ a salir, o hacer algo que le gustara.
-Hijo, solo por hoy. –suplicó. –Por favor. –junto sus manos.
Suspire rodando los ojos y asentí.
-Gracias pequeño. –dijo abrazándome.
Caminé hacia donde estaba (tn)___, no dejaba de ver las fotos mientras sonreí, como me encantaba sonrisa.
-Hola. –le hablé para llamar su atención.
Ella me miro y sonrió al instante.
-¿Por qué te llamo tu mama?. –me preguntó confundida, sabía que de todas maneras tenía que decírselo.
-Te tengo que decir algo. –le dije.
-¿Es algo malo?. –levantó una ceja. –No me asustes Cameron.
-Tranquila no lo es. –agarré sus mejillas suavemente. –Solo es que hoy, van a venir mis hermanastras.
-¿Era solo es?. –bufó. –Pensé que era algo grave.
-Para mí eso es muy grave.
-Cameron, solo son tus hermanastras. –rodó sus ojos.
-Tú no sabes cómo son ellas. –me crucé de brazos. –Son unas pesadas. –vi mi reloj y ya iban a ser las cuatro. –Ya tenemos que irnos.
Agarré su brazo y la lleve al estacionamiento donde estaba el auto.
-¿Por qué tan apurado?. –me soltó de repente.
-Mi mamá dijo que llegarían a la casa a las cuatro.
-¿Se van a quedar en la casa?. –me preguntó rápidamente.
-Sí, creo que se quedarán una semana. –hablé y empecé a conducir, vi que (tn)___ elevo su cejas y puse una mueca de desagrado.
Seguí manejando, acelerando la velocidad hasta la casa.
Llegamos y a lo lejos pude ver maletas rosadas y unas negras.
Genial, ya llegaron.
Estacioné el auto y noté que ahí estaban Madison y Alison.
Ninguna de las dos me agradable completamente, solo podía decir que con Alison podía mantener una conversación normal, ya que creo que una vez me contó que era lesbiana y tenía su novia, pero no sabía cómo decirle a mi padre.
Y Madison, pues ella es la que no me cae, es muy aventada y nunca me deja en paz empieza a perseguirme e intenta algo conmigo, sabiendo que somos hermanastros.
Y que cambios.
La última vez que las vi eran unas nenitas pequeñas que no dejaban de molestar, ahora estaban totalmente distintas.
Sentí un golpe en el brazo, que me hizo reaccionar al instante. Volteé y era (tn)___ que no dejaba de fruncir el entrecejo. Podía apostar que estaba celosa de que mirara tanto a mis hermanastras.
-¿Sucede algo?. –pregunté haciéndome el loco.
Ella no me respondió y siguió caminando hasta la entrada.
Creo que aprovecharé en poner celosa a (tn)___
Sería divertido, además ella no lo quiere admitir.
Y Yo hare que lo admita.
Camine hasta donde están mis hermanastras que al parecer no habían notado mi presencia.
-Cameron, qué onda hermano. –me saludo Alison, chocando las manos.
Ahora lo que se me venía.
Madison me miro de pies a cabeza, y disimuladamente mordió su labio inferior, se acercó hacia mì saltando encima mío y rodeando sus piernas en mi cintura.
-Cam, te extrañe mucho. –dijo Madison susurrando sobre mi oreja.
La baje rápidamente y le dedique una sonrisa falsa.
Vi fugazmente a (tn)____, que nos veía fulminándonos con la mirada, mientras entraba a la casa, dando un portazo fuerte.
-Hay pero que niña más amarga. –dijo Madison poniendo una mueca de asco.
-No lo es. –le dije.
-Sera mejor que entremos, muero de hambre. –dijo Alison tocándose el estómago.
Asentí y las ayude con algunas maletas.
Mi plan estaba funcionando.
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Lo siento mucho, por demorarme pero aqui esta.
Espero que les haya gustado.
¿No veo que comenten?
Intentaré subir un capitulo mas tarde.
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Always Be In My Heart -Cameron Dallas-
FanfictionMi vida como cualquier otra, no ha sido la que todas quisieran tener. Sentía que todo el sentido de mi vida se iba acabando lentamente. Hasta que. Lo encontré a él. Literalmente mi vida dio un giro inesperado en ese momento. ¿El destino? Tal vez. L...