𝐁𝐫𝐨𝐭𝐡𝐞𝐫'𝐬 𝐠𝐢𝐫𝐥

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El gimnasio improvisado en el escondite de la Liga de Villanos estaba lleno de actividad

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El gimnasio improvisado en el escondite de la Liga de Villanos estaba lleno de actividad. Los ecos de golpes y respiraciones pesadas resonaban en la sala, interrumpidos solo por el sonido de los entrenadores y el ruido de los aparatos de ejercicio. Astra, ahora de 15 años, estaba en el centro de la acción, sus músculos tensos y su cabello sudoroso pegado a su frente.

Se movía con una agilidad y fuerza impresionantes, sus golpes resonaban en el saco de boxeo con una intensidad que demostraba su arduo entrenamiento. Sus movimientos eran precisos, cada patada y golpe cuidadosamente calculado para maximizar el impacto. Su rostro, aunque determinado, mostraba signos claros de agotamiento.

Dabi, que había estado observando desde un rincón, frunció el ceño al ver cómo Astra empujaba su cuerpo al límite. Aunque estaba orgulloso de la fortaleza y la habilidad de su hermana, sabía cuándo era el momento de intervenir. Había sido un año de entrenamiento duro para ella, y la disciplina que había adquirido a lo largo de los años ahora la estaba llevando a un punto en el que estaba sobrecargada.

— ¡Astra! — gritó Dabi con una voz firme que cortó el ruido del gimnasio.

Ella no respondió de inmediato, completamente inmersa en su rutina, pero la orden en su voz la hizo detenerse finalmente. Se giró hacia él, respirando con dificultad y con una expresión de agotamiento en su rostro.

— ¿Qué pasa, hermano? — preguntó, tratando de recuperar el aliento mientras se limpiaba el sudor de la frente.

Dabi cruzó los brazos y se acercó a ella con una mirada preocupada. — Estás llevándote al límite, Astra. Necesitas descansar.

Astra trató de protestar, pero su cuerpo le dio la razón antes de que pudiera abrir la boca. Un temblor pasó por sus piernas, y su respiración se volvió aún más agitada. — Estoy bien, solo un poco cansada.

— No — dijo Dabi, tomando el brazo de su hermana y llevándola hacia una esquina del gimnasio. — Estás agotada. Si sigues así, te vas a lastimar.

Se dirigió hacia un banco cerca de ellos y la hizo sentarse. Astra se dejó caer en el banco, respirando con dificultad, mientras Dabi iba a buscar una botella de agua y una toalla.

— Has estado entrenando intensamente durante semanas. Sabes que el entrenamiento no solo se trata de fuerza, también de recuperación — le dijo, dándole el agua y secándole el sudor con la toalla.

Astra tomó el agua con agradecimiento, sintiendo un alivio inmediato al hidratarse. Miró a Dabi con una mezcla de frustración y gratitud. — Solo quiero mejorar, hermano. Quiero ser lo mejor que pueda ser.

Dabi le dio una sonrisa comprensiva. — Lo sé, Astra. Pero también necesitas cuidar de ti misma. No puedes ser la mejor si no te permites descansar y recuperarte. La fuerza viene tanto del entrenamiento como del descanso.

Astra asintió lentamente, sintiendo el peso de sus palabras. — Está bien, tomaré un descanso. Gracias por detenerme.

Dabi se sentó a su lado, colocando una mano en su hombro en un gesto de apoyo. — No es solo por ti. Es porque quiero que estés en tu mejor forma, y eso incluye saber cuándo detenerte. Todos tenemos nuestros límites, y es importante respetarlos.

𝐇𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐢𝐭𝐨 || 𝐃𝐚𝐛𝐢/𝐓𝐨𝐮𝐲𝐚 𝐓𝐨𝐝𝐨𝐫𝐨𝐤𝐢 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora