Los Angeles, donde Mad nació, fue cambiado a Phoenix.
Foto de Daniel en multimedia :)
Capítulo dedicado a:
—¿Por dónde empiezo? —preguntó Daniel tomando un trago de su vaso de jugo.
—Desde que tu cabeza ideó algo tan nefasto como para hacer que te expulsen —dije con una media sonrisa.
—Bueno, la cosa comenzó cuando Peter Shelman me empujó contra los casilleros del gimnasio por "coquetear" con su novia —contó haciendo comillas con sus dedos —. La verdad es que ella comenzó el juego, pero eso no tiene importancia —rodé los ojos —. Y bueno, ya me conoces, no pude quedarme de brazos cruzados, por lo que cuando él se bañaba luego de su entrenamiento de básquet le quité toda la ropa que tenía (también las toallas) y cuando salió de la ducha le tiré globos de pintura por todo el cuerpo y comencé a correr.
Solté una gran carcajada sin poder evitarlo. Imaginarme toda aquella escena era demasiado para mi.
—¿En-entonces le viste su amiguito? —le pregunté cuando me tranquilicé —. Dime que no te has hecho gay.
—Con esa cosita que tenía es imposible hacerte gay —dijo haciendo que riamos ambos —. Y bueno, el director me había dado una última oportunidad luego de incendiar sin querer unos cuadros de arte y gritar «¡Si nosotros ardemos, tu arderas con nosotros!» a la profesora con cara de dinosaurio, así que —levantó los brazos —, aquí estoy.
Me atraganté con mi café y comencé a reír como una foca. Realmente parecía una foca.
Verán, Daniel tenía una gran —GRAN— obsesión con The Hunger Games; se vio las películas unas diez veces (cada una), y releyó los libros hasta que se sabía las conversaciones enteras.
—¿Y ahora te hospedas en mi casa porque...?
—Mi padres se enfadaron, y pensé: Oye, es una gran oportunidad para visitar a Madi.
—Ya veo —asentí con una sonrisa —. Bueno, eres bienvenido, mi papá estará encantado de que estés aquí.
—Me ama —dijo orgulloso —. ¿Y cómo te ha tratado la adolescencia, querida amiga-casi-no-mujer?
Lo miré mal antes de reír.
Le conté todo lo que había ocurrido que no había sido hablado por ambos. Las cosas de mi madre, los problemas en los que nos había metido con los chicos, y lo que ocurrió con Jamie. Dan prestó suma atención en ese momento, como si mi voz se hubiera convertido en su radionovela favorita.
—En serio te gusta —dijo una vez que terminé de contarle sobre aquella... noche.
—SHHHHHH —dije haciendo un gesto con mis manos —. Decir eso esta prohibido, mi amigo.
—Es la verdad —se encogió de hombros —. Lo dijiste y besaste a ese chico ebria, sabes que eres una borracha sincera.
—Por el amor a los chocolates, ¡hasta bailé La Macarena! Eso no es estar en mis cabales...
—Como digas, Madi, pero tarde o temprano, tendrás que superar el miedo y decirlo en voz alta y sobria.
Lo miré con los ojos entrecerrados.
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No Soy La Típica Chica© (Cancelada)
Humor«-No lo repetiré dos veces, así que espero que lo entiendas con ese maní que tienes de cerebro: NO. SOY. LA. TÍPICA. CHICA.» #42 in Humor. 25/04/2015. #32 in Humor. 09/06/2015. #28 in Humor. 11/06/2015. #17 in Humor. 14/07/2015. #16 in Humor. 12/09...