Mientras Dante lucha con sus pensamientos intentando convencerse de que ella no haría tal cosa, el frena de golpe al ver como Ivy se sube a un taxi, este frunce el ceño de solo pensar en la forma en que ella miraría a otra persona. Él sigue el taxi que lo lleva a la ciudad, él aunque esté estresado Dante puede mostrar que está serio, aunque no fuera así. Él tenía la capacidad de controlar sus emociones y mostrarlas cuando él quería, mientras con una mano toma el volante con la otra hace los cambios, sus manos le empiezan a sudar, lo que lo delata, demostrando su nerviosismo. Dante frena de golpe al ver demasiados taxis en las calles ¿Cuál sería?¿En cuál de todos estaría Ivy? Se preguntaba mirando de acá para allá, el no tiene opción más que llamar a sus agentes, él toma su celular y llama a Nales :
—Hola, ¿Qué necesita señor Dante? —Lo dice Nales desde la otra línea, mostrando serenidad
—Nales, llama a los chicos. Ivy se escapó en un taxi, no entiendo como los otros la dejaron salir de la mansión. —Dante muestra su furia en su tono de voz. Mostrando su fuerza y el odio que tiene por sus compañeros en el momento
—Claro señor. Ahora vamos para allá. —En eso se escucha del otro lado de la línea como él toma un arma y lo guarda en su traje, mostrando que la situación se puso seria.
Dante cuelga y murmura "Ivy, ¿cómo te atreves a irte? Ya verá el precio que va a pagar cuando la haya encontrado desgraciada" Él aprieta el volante moviéndose con agilidad entre las calles, demostrando que es bueno conduciendo.
Mientras tanto en otro lado...
Mientras Ivy viaja en el taxi por las calles de la ciudad ella se pregunta "¿cómo será Emiliano?, ¿Será un tipo agradable? ¿Cuánto sabrá de Dante?" Y así ella se llenaba de preguntas sin respuestas todavía en su cabeza. El auto frena de golpe lo que hace que Ivy recupere la conciencia del mundo real, notando que ya está frente a la cafetería, ella emocionada le da al chofer su paga con entusiasmo, entonces se baja, "Qué emoción. Al fin, conoceré al mejor amigo de Dante, Emiliano. ¿Qué cosas voy a descubrir sobre la infancia de Dante" Ella sostiene su bolso y entonces entra a la cafeteria, ella mira por los rincones, intentando encontra a Emiliano, pero era imposible ni siquiera sabia como era, en eso ella suspira y se sienta no mas :
—Hola, Ivy ¿Verdad? —Habla un joven de voz grave, era un tipo alto con pelo medio largo rubio. Era guapo, lo admito. Sostenía un libro y llevaba camisa blanca con mangas que le llegaban a los codos. Usaba unos lentes negros, una leve sonrisa se me poso encima — Yo soy Emiliano Pensotty.
—Hola. Si soy Ivy. —Hice notar con una sonrisa dibujada en mi rostro, era intrigante. El se sentó frente a mí, sus piernas rozaban las mías— Un gusto verlo Emiliano.
—Llamame Emi por favor —Su sonrisa era cálida, me hacía sentir bastante cómoda la verdad— Me alegro poder haber encontrado a la mejor amiga de Dante. Él me había contado mucho de ti cuando éramos pequeños. Ya veo que no mentía cuando decía que eras hermosa.
—Gracias por el halago—Me sonroje levemente. Parecía un buen tipo— ¿Podría hablarme de Dante? Ya sea como se conocieron y todo eso.
—Claro. Para eso viniste—Me sonrió mientras llamaba a uno de los camareros. Entonces él apuntó a un capuchino del menú y yo a un cafe. Entonces el camarero se retiró para pedir— Dante, es muy serio eso es lo principal. A veces, aunque no lo muestre, él muestra amor a su manera. Ejemplo: A mi me mostraba amor cuando me decía hermano, de vez en cuando se me acercaba y me sacudía el pelo. A su madre le demostraba amor con abrazos y dándole florecillas que encontraba por ahí.
Él dio una pausa y dio una sonrisa medio triste y continuó diciendo
—Cuando su madre falleció, él no mostró nada, ni dolor, tristeza, nada. Me sorprendió mucho, porque ella era como mi segunda Madre, y yo quedé muy mal por su muerte. Yo lo iba a visitar y cuando su hermana hablaba de su madre él no mostraba ninguna emoción. Un día estábamos en el jardín, y en eso yo me acerque a las flores que le dábamos a su madre, yo me arrodillé y dije con pena "Ya no podremos darle las flores que tanto les gustaba. ¿Era necesario que se fuera tan de golpe?" —Baja la cabeza con lastima pero tambien con seriedad—Yo empecé a llorar, y en eso escuché el sollozo de él detrás mío, yo me di vuelta y él empezó a llorar a gritos. Solo eramos niños, a ambos la vida nos arrebató nuestras madres. Dante, se guarda muchas cosas, él cree que lo que le ha pasado antes son su problema y que él puede solo. Pero se daña él solo.
En eso llegaron nuestros pedidos. Él agarró el suyo y me pasó el mío. Emi me miró fijamente y dijo con alegría y satisfación:
—Cuando Dante me vino a visitar una tarde, él se veía feliz, yo le pregunte que sucedía, él quedo pensativo pero terminó diciéndome que no era nada. Así estuvo una semana, y cuando volvió a mi casa él vino corriendo hacia mi y después de tanto tiempo lo volví a ver feliz. Entonces emocionado me dijo con una sonrisa "¡¡Emi!! No sabes lo que paso" Entonces me contó de ti, de una niña que conoció en la plaza, alguien que lo hacía sentir único como su madre, él se sonrojaba mientras ponía cara seria, "Ella es tan linda, sus ojos son más bellos que el mismo amanecer. Me siento tan... vivo cuando la tengo a mi lado" —Emi da una sonrisa de solo recordar el suceso. Apoya su rostro sobre sus dos manos, sierra por un momento los ojos y me ve.— Obviamente le sonreí y dije "¿Estás seguro de que ella no te gusta?" El se puso de pie mientras se ponía firme diciendo "¡Claro que no!....Bueno, tal vez. Incluso ¿sabes qué?Me dijo que se casaría conmigo, eso me alegra pero...¿Cómo ella puede pensar eso con alguien como yo?" En su cara se mostraba algo de tristeza. Le di unas palmaditas y desde entonces me contaba cosas tuyas, de tu forma de sonreír, y de lo tentador que se veían tus labios él me decía " Unos ojos perfectos, labios dispuestos a mí. Es la primera vez en la que deseo algo así ¿Es normal?"
Lo que yo escuchaba me hacía tan vulnerable, con cada palabra sentía más atracción hacia Dante. Deseo conocerlo más. Siento ahora que el único lugar en donde me siento amada es con el Mafioso ese... el loco Dante.
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Sombra del deseo.
Non-FictionIvy nunca imaginó que su vida cambiaría por completo en un abrir y cerrar de ojos. Un misterioso y oscuro joven la secuestra, llevándola a una lujosa mansión rodeada de sombras y secretos. Él es Dante, el implacable líder de una poderosa mafia, con...