𝘀𝘁𝗼𝗽 - 𝗵𝗮𝗼𝗯𝗶𝗻

04

Gyuvin. Su Gyuvin estaba besando a alguien. Gyuvin besaba a un chico mayor. ¡¡Su Gyuvin estaba besando a un chico mayor!!

No supo cómo pudo dejar de lado su miedo, pero se acercó a la pareja, los cuales no habían notado su presencia. Matthew intento detenerlo tomando su brazo, pero se deshizo del agarre y cuando estuvo cerca tomó a Gyuvin del mismo.

—¿Qué...? — el menor se puso de pie extrañado por lo que acababa de suceder. Hasta que vio el molesto rostro de Hanbin. —¿Qué haces aquí?

Matthew se acercó, tomando a Hanbin del hombro y alejandolo un poco; estaban bajo las burlonas miradas de los demás, quienes expectantes querían saber el contexto detrás de aquella molestia. Ricky, por su lado, se puso de pie, parándose frente a Gyuvin, encarando a Hanbin.

—Basta, déjalo en paz. Ya no es un niño que tiene que seguir lo que dice su hermano mayor. —Shen tomó la mano del más bajo con la intención de irse, sin embargo, el de cabello castaño sujeto a su hermano, quien lo miró molesto.

—No entiendo por qué haces esto, ¿tanto me odias? — se soltó del agarre de su mayor, viendo a este directo a los ojos. —¿Sabes? Te odio, te odio tanto.

Y luego de eso, se fue de la habitación, dejando a Hanbin con un dolor en el pecho.

[ ¡ stop ! ]

No quería regresar a casa, sabía que probablemente su hermano estaría ahí. Y tampoco quería arruinarle la noche a Matthew, así que salió al patio y se sentó en el césped, abrazando sus piernas y conteniendo las lágrimas; él entendía que Gyuvin ya no era un bebé, y que no podía controlar todo lo que hiciera. Pero tras años protegiéndolo de todo, no podía evitar preocuparse por la mínima cosa que este hiciera. Aún cuando terminará empeorando todo...

—Vaya escena. — levantó la cabeza mirando a su lado. Un chico le miraba de reojo mientras fumaba de un cigarro a nada de terminar.

—¿Quién eres tu? — cuestionó con la voz adormecida, volviendo a su posición anterior. El chico soltó el humo y se acomodo en el suelo.

—Soy amigo de Keita, y de Ricky. De tu hermano también. — podía escuchar la tranquilidad con la que hablaba, y aunque no comprendiera por qué estaba ahí, de alguna forma le hacía olvidar el dolor que sentía.

—Gyuvin no tiene amigos drogadictos. — soltó sin realmente querer ser escuchado, pero el contrario río ante su comentario y volvió a meter el cigarro en su boca.

Hubo un pequeño silencio, donde Hanbin giraba su cabeza de vez en cuando para apreciar al chico fumando sin ninguna preocupación.

—No soy "drogadicto", lo hago por estrés. Y no consumo drogas, en realidad, sólo fumo... — le dio una vaga mirada, notando como los ojitos rojos de Hanbin le miraban mientras escondía su rostro entre sus brazos. —No sé si eso cuente como droga, la verdad. No estudio nada relacionado como para saberlo.

Volvió a soltar el humo y suspiro recargandose en sus brazos, después de apagar el cigarro en el suelo.

Hanbin se mantuvo en silencio, no quería decir nada al respecto pues no tenía realmente nada que soltar. La idea de seguir llorando no sonaba agradable, así que solo se puso de pie y limpio su pantalón, alejándose de ahí bajo la atenta mirada dem pelinegro.

[ ¡ stop ! ]

IIIIHHHH q opinan de todo