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Hanbin estaba en casa de Matthew, quería despejarse un poco sabiendo que Gyuvin estaría estudiando para un examen que tendría, así que visito a su amigo. Sin embargo, no contaba con que el novio de este se encontraría en la casa del mismo y menos que al llegar este abriera la puerta sin camisa.

—No sabía que vendrías, perdón. — Seok había bajado segundos después sin pantalones, lo cual le dejó muy claro al castaño el por qué de la presencia de su novio. —Jiwoong ya se iba, de todas formas.

Miró al mencionado, quien ahora estaba vestido y se despidió de Matthew dándole un beso en los labios, saliendo después de la casa.

—¿A que venías? — preguntó Matthew extendiendole un jugo de naranja al inquilino.

—¿No puedo venir sin querer cogerte? — Matthew le cubrió la boca y lo miro molesto, también le dio un pequeño golpe al separarse.

—No hicimos nada, lo juro. — se sentó a su lado con las mejillas rosas.

—Sí, claro... — bebió de la botella y se recostó en el sofá mirando el techo. —Quería hacerme algo.

—¿Qué cosa?

—No lo sé, tal vez teñirme o cortarme el pelo, o alguna perforación. Un tatuaje estaría bien-

—Wow, wow, wow- ¿Por qué tan rebelde últimamente? — Hanbin lo miro molesto. —No vas a cortarte el cabello, te queda hermoso largo. Y ninguna perforación a menos que sea en las orejas, sabes que le temes a las agujas. Y un tatuaje... La verdad suena bien, ¿qué te harías?

—Es mi cabello, Seok Matthew. — reprocho sentándose recto en el sillón. —Algo pequeño, en... ¿La cintura?

Matthew chilló poniéndose de pie, pareciendo más emocionado que él mismo. —¡Se vería hermoso! ¡Puedes teñirte! ¡De rubio! ¡Omg, Hanbin serías taaaan caliente!

—¡Cállate! — se puso de pie para darle un pequeño empujón a su amigo, quien no dejaba de contar todo lo que podría hacerse. —No quiero verme "caliente"... — señaló con vergüenza. —Sólo un pequeño cambio.

—Okay, okay. Entonces, el tatuaje y el cabello. ¡Vamos! — el morocho le tomó de la mano queriendo arrastrarlo.

—¿Qué? ¿Ahora? — Matthew soltó un "Sí" emocionado y, colocándose sus zapatos, salieron de la casa.

[ ¡ stop ! ]

—Cambiaste más que cuando te pegó la pubertad. — Park Hanbin claramente se arrepintió de lo que dijo cuando el golpe que Hanbin le soltó terminó en su costilla, haciéndole inclinarse. —Aún así eres lindo. — dijo con dificultad viendo a Chanhee tomar asiento en su banco, llamando la atención de todo su salón.

—¡Te vez hermoso! No te voy a superar nunca. Hanbin rubio te rezaré siempre. — Matthew entro al aula soltando sus comentarios innecesarios y logrando un sonrojo en Sung, el cual sólo bufaba y se centraba en su cuaderno.

El resto de su día estuvo lleno de alagos, más que nada por parte de Matthew, quien no dejaba de repetirlo lo lindo que se veía, incluso en clase de deporte le gritaba cosas desde la banca cuando jugaba voleibol.

[ ¡ stop ! ]

hanbin rubio te extraño pero hanbin rosita fresita te amo ><

𝘀𝘁𝗼𝗽 - 𝗵𝗮𝗼𝗯𝗶𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora