La Conspiración de las Rosas [Gwayne Hightower X OC] [House Of The Dragon]

Capítulo 13

La cena en las recámaras de la reina Alicent era un evento cuidadosamente planeado, destinado a reunir a varias damas de la corte en un ambiente relajado y elegante. Las paredes estaban adornadas con tapices ricos en colores y motivos. Alicent había ordenado retirar los antiguos tapices por considerarlos "demasiado obscenos", ordenó que los decoraran con nuevos adornos, un poco más discretos. En una de las paredes, había un enorme tapiz que cubría casi toda la pared y tenía delicadamente pintado la ciudad de Oldtown.

Las mesas estaban decoradas con flores frescas y candelabros de plata que emitían una luz suave y cálida. El aroma de los platos finos y los vinos exquisitos llenaban el aire, creando un ambiente de lujo y confort.

Floris Baratheon, con su habitual encanto, conversaba animadamente con las demás, sus risas y su facilidad para captar la atención de todos eran evidentes. Vestía un elegante vestido de terciopelo amarillo que acentuaba su estatura y sus características regias, y parecía disfrutar cada momento del evento.

Anne, por otro lado, llevaba un vestido azul profundo que complementaba sus ojos oscuros, pero su sonrisa era menos brillante. Aunque se esforzaba en participar en la conversación, con ayuda de Mina que también estaba allí, su mente parecía estar en otro lugar. Se notaba que estaba bajo una presión constante, consciente de la importancia de la noche para su futuro.

Lady Bracken y Lady Blackwood, conocidas por su rivalidad, intercambiaban comentarios con una mezcla de cortesía y tensión apenas disimulada. La discreta rivalidad entre Floris y Anne no había sido indiferente para ellas, y ambas tomaron sus respectivos bandos. Lady Elinor Bracken era más cercana a Anne, mientras que Alyssa, siempre dispuesta a llevar la contra, se puso del lado de Floris.

Alicent observaba a las damas desde su asiento en la cabecera de la mesa, evaluando cada detalle con cuidado. Mientras las conversaciones se desarrollaban y las risas llenaban la habitación, la reina tenía la oportunidad de observar las dinámicas entre Anne y Floris que, intencionalmente, Alicent sentó una al lado de la otra.

En cierto momento, Criston Cole abrió la puerta y anunció la presencia de Gwayne y Helaena. La llegada de Gwayne y su sobrina al evento trajo un nuevo aire a la cena, y Alicent le insistió en que él también se quedara. La princesa, conocida por su carácter más reservado, se acomodó en un rincón de la habitación, claramente incómoda con la multitud de damas y la animada conversación. Gwayne, con su porte habitual, se acercó a Alicent, intercambiando algunas palabras cordiales mientras observaba el ambiente.

La conversación estaba en su punto máximo de animación cuando Mina, siempre astuta y con un sentido agudo de las oportunidades, propuso una idea para destacar a Anne.

—Su Majestad, ¿por qué no invita a Anne a cantar para nosotros? Su voz es muy hermosa y seguro que encantará a todos—sugirió Mina con una sonrisa que reflejaba su intención de dar a Anne una oportunidad para brillar.

Sin embargo, antes de que Alicent pudiera responder, Gwayne intervino.

—Creo que Floris también canta muy bien. ¿Qué tal si Floris nos ofrece una muestra de su talento?

El comentario de Gwayne fue como un rayo en medio de una tarde tranquila. Floris, al principio, lanzó una mirada victoriosa hacia Anne, como si estuviera asegurando su posición frente a la joven Tyrell. Pero cuando se dio cuenta de la intención real detrás del comentario de Gwayne, su sonrisa se desvaneció lentamente. Gwayne no solo estaba elogiando el talento de Floris, sino que también estaba moviéndola de su lugar al lado de Anne, para poder ocupar ese asiento.

Mina, inicialmente molesta por el cambio de planes, se dio cuenta de que Gwayne había usado una estrategia para crear una oportunidad para que él pudiera acercarse a Anne sin la distracción de Floris. Con un suspiro, aceptó la jugada y observó cómo Floris se levantaba con una mezcla de sorpresa y frustración.