Un mes después

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Orm esperaba a Ling en el recibidor de la casa de sus padres, mientras su amante lograba acabar de despedirse. Había sido su cena de presentación en familia. Dado que ya se habían acabado los postres y la conversación se había vuelto forzada, Orm estaba más que lista para marcharse.

"Gracias a las dos por venir". les dijo el padre de Ling.

Chang Kwong era un hombre alto y tan reservado que parecía que le doliera algo de manera permanente.

"Gracias por invitarnos". Ling le dio a su madre un abrazo breve y algo forzado.

"La cena estuvo deliciosa, mamá".

"Me alegro de que te haya gustado".

Apasiri Kwong le sonrió, prudente y esperanzada a Orm. Era una mujer elegante, con facciones finas y cabello perfectamente peinado.

"Estaba deliciosa, señora Kwong".

Chang Kwong esbozó una sonrisa nerviosa y sus ojos saltaron de Ling a Orm.

"Ha sido un placer conocerte, jovencita".

"Sí, para mí también". coincidió Zeng, el hermano menor de Ling desde la puerta del comedor. "Ha sido genial conocer por fin a la novia de Ling".

Le dedicó a Orm una sonrisa coqueta y esta se preguntó si el énfasis en la palabra «novia» había sido cosa de su imaginación. Obviamente, para la familia de Ling, el que estuviera saliendo con alguien era toda una novedad, y ya ni hablar de que ese alguien fuera una persona del mismo sexo.

Orm soportó un nuevo repaso por parte de los ojos hambrientos de Zeng. Si no hubiera sido el hermano menor de Ling, seguramente lo habría cortado con un comentario sarcástico que cuestionara su hombría. Se había sentido observada toda la noche, y la incomodidad de Ling no se le había pasado por alto. Tanto la una como la otra habían sido miradas con lupa. Ahora bien, a Orm no le extrañó el intenso escrutinio, y no tuvo la impresión de que la familia Kwong se llevara una opinión negativa de ella o de Ling. Al fin y al cabo, tenía que resultarles extraño ver a su hija bajo una luz tan diferente.

Orm sonrió a los tres con toda la confianza que fue capaz de reunir. Para lograrlo pensó en sus actuaciones y su carisma en el escenario. «Déjalos boquiabiertos, princesa.»

"Tenemos que reunirnos pronto".

Orm lo decía en serio. Entendía porqué Ling quería evitar las situaciones familiares incómodas, pero sospechaba que si Ling y ella visitaban a los Kwong regularmente, se relajarían todos un poco.

A Chang se le iluminó la cara.

"Tienes razón, lo repetiremos". Abrazó a una Ling más que tensa. "¿Tú qué dices, pastelito?"

Orm se esforzó por no reírse al oír el apodo y ver a Ling ponerse como un tomate. Cuando Ling se apartó de su padre, dijo:

"Claro que sí, papá".

Cogió a Orm de la mano, pero no lograron dar ni dos pasos antes de que Zeng se plantara delante de Ling con una sonrisa traviesa. La cogió y la abrazó con fuerza. En el proceso, casi le hizo perder el equilibrio.

"Me alegro de verte, hermanita". rugió.

Entonces la soltó e hizo ademán de repetir el abrazo con Orm. «Ah, ya te encantaría, ¿No colega?»

Orm resistió su impulso de retroceder, pero para su alivio, en ese momento Ling le rodeó la cintura con el brazo. Zeng miró a Ling con complicidad y le susurró al oído. "No hagas nada que yo no hiciera".

13 Horas (LingOrm)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora