en toda la oscuridad de su familia disfuncional, lyle encuentra un pequeño destello de luz al enamorarse profundamente de una actriz con belleza angelical.
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✦⠀ lyle menéndez x female...
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⠀ Su padre, caminaba de un lado a otro en la entrada principal de la casa, en su traje costoso de siempre. Se prepara para salir al trabajo, hacia los estudios de grabación. El sol brillaba a través de las grandes ventanas de la mansión, y Erik después de un temprano entrenamiento de tenis, había regresado a la casa para relajarse antes de continuar con su día.
Mientras pasaba por las escaleras camino a su habitación, el menor escuchó la voz grave de su padre al otro lado de la puerta del despacho, era un tono demasiado alto y sonaba furioso. Su padre rara vez levantaba la voz a tal nivel y por la intensidad de sus palabras, hizo que Erik se detuviera en seco.
Se pegó a la pared, acercándose un poco más. Sabía que no era correcto espiar, pero la curiosidad y la preocupación lo consumieron.
—¿Te crees mejor que las otras actrices? ¡Eres solo una niña patética y arrogante! No tienes ningún poder aquí. —la voz de su padre retumbaba con furia.
Erik sintió que su corazón comenzaba a latir con fuerza. La respiración se le cortó por un momento mientras intentaba procesar lo que estaba escuchando. Su padre continuaba, pero lo que venía después lo dejó paralizado.
—¿Quieres ser una gran estrella? Entonces empieza a comportarte como tal. Si quieres ser alguien en esta industria, ya sabes lo que tienes que hacer, porque con una sola llamada puedo hacer que tu carrera termine.
La mente de Erik se nubló. Aunque su padre no había mencionado un nombre, las palabras y el tono que utilizaba encajaban perfectamente con lo que ya sospechaba. Estaba hablando de Blair. Tenía que estar hablando de ella. Todo lo que había pasado entre Blair y Lyle, la forma en que su padre la miraba con demasiada atención en las cenas, los comentarios susurrados y las miradas incómodas.
—Tú decides, pero no olvides con quién estás tratando. —finalizó antes de colgar con un golpe seco el teléfono.
Erik retrocedió unos pasos, su corazón golpeando en su pecho, intentando calmarse antes de que su padre lo viera. Al escuchar la puerta del despacho abrirse, se giró rápidamente y subió las escaleras sin hacer ruido, antes de que su padre pudiera notar su presencia. La rabia y el desconcierto lo envolvieron por completo. No podía creer lo que acababa de escuchar.
Sin pensarlo dos veces, fue directo a la habitación de Lyle. La puerta estaba entreabierta, y al entrar, vio a su hermano acostado en la cama, hojeando una revista sin prestar demasiada atención.
—¡Carajo! —exclamó Erik, aún intentando controlar su respiración
Lyle levantó la vista, notando de inmediato la agitación en el rostro de su hermano. Se incorporó, dejando la revista a un lado.
—¿Qué pasa? —preguntó Lyle con el ceño fruncido —¡Dime, maldición!
Su hermano, aún intentando procesar lo que había escuchado, tomó un respiro profundo antes de hablar.
