Y por un instante, todo cesó.
Ya no escuchaba la sangre que caía sobre mi mano.
Ya no escuchaba más que mi propio corazón latir y mi sudor caer contra la madera seca de ese burdel.
Sentí un terror que puso mis pelos de punta, y como un gato cuando se siente amenazado; todos mis sentidos se agudizaron.Un tornillo bastó para que la máquina comenzará a moverse.
Miles de frases aturdieron mi mente, acompañadas de recuerdos de un pasado fúnebre.<<Un hermano mayor daría todo por sus hermanos menores.>>
<<Eileen nos empezó a evitar desde pequeño.>>
<<No rechaces pistas valiosas solo para que no salga culpable el que no quieres.>>
Aquella última oración fue un hilo conector que me llevó a la verdad.
¿Quién dejaría a sus hermanos solos tras recibir amenazas de muerte?
¿A quién se le ocurriría dejar sola a su hermana en la misma casa que secuestraron a una persona?Estaba claro..
Eileen era el culpable.—Espero que algún día me puedas perdonar, Sarah. —
Era demasiado tarde.
Estaba detrás mío, sentía su respiración sobre mi espalda.
Mientras me quedaba inmóvil, aquel trapo con cierto olor a químicos se acercaba a mi boca.Cloroformo.
Vi un atisbo de luz, y recupere las memorias de los años vividos.
Desde que mi hermana mayor sujetará mi cuerpo moribundo y corriera lejos de los nazis, hasta verme a mi misma comprando pasajes para ir con urgencia a Italia.Este hijo de puta sabía de mi existencia desde un primer segundo.
Él sabía que vendría aquí y esta misma escena ya la había repetido miles de veces mientras que, para mí, era la primera.Iba un paso por delante.
No, diez..
No, ¡un millón!
Pensó en cada posibilidad, pensó en absolutamente todo.. ¿Qué tan psicópata tienes que ser para hacerlo.. ? ¿O qué tan paranoico?Lo último que recordé fue cuando sujete la mano de Astrid por primera vez.
La veía temblar y le di mi chaqueta.
La cubrí con mis brazos hasta llegar a la comisaría, prometiendole que todo estaría bien.
Estuve en la misma cama que aquel asesino estaba.
Me estuve besando con el culpable que tanto buscábamos.Perdoname por dudar alguna vez de ti, Astrid.
Pero una promesa se cumple, y mientras mis fosas nasales se llenan de este asqueroso líquido.. Te vuelvo a prometer que todo estará bien.Y a Halinka también se lo prometo.
Sentí como mi cuerpo caía, el latido de mi corazón se volvió mil veces más fuerte..
Fui sujetada por los brazos de un traidor, y cerre mis ojos para no ver el cruel destino de frente, aunque me quedarán algunos segundos de consciencia.