Cap 15- ''El día que no ocurrió''

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28 de marzo del 2019

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El aire en la oficina de Reginalds era denso, como si las paredes mismas guardaran secretos. Diego y Jayden se encontraban rodeados de cajas apiladas y viejas notas que pertenecían a su padre adoptivo. Luther, con su estatura imponente y su expresión de ansiedad, estaba sentado en el suelo, revisando un montón de sobres amarillentos perfectamente sellados.

—¿Cómo es posible que nunca los abriera? —murmuró Luther, su voz temblorosa. Su mano se cerró sobre uno de los sobres, como si pudiera absorber su contenido solo con tocarlo.

Diego, mirando a Ocho de reojo, se acercó a su hermano. Su instinto protector se activó, pero sabía que no era bueno en estas cosas, menos con Luther, con quién no se llevaba particularmente bien. Dos hizo un movimiento con su cabeza indicándole a Jayden que interviniera, ella hizo una mueca pero dio un paso adelante con suspiro resignado.

—Tal vez... tal vez no quería enfrentarse a lo que había dentro, Luther. A veces, la verdad es más dura que la mentira —dijo Jayden, tratando de sonar reconfortante, pero sus palabras se oían vacías.

Número Uno alzó la vista, sus ojos llenos de confusión y decepción. —¿Y qué? ¿Acaso no pensó en lo que eso significaba para mi? Pasé años esperando respuestas, pensando que tal vez... tal vez necesitaba más tiempo—

Diego frunció el ceño. La incomodidad del momento le nublaba la mente. —Oye, no es tu culpa que él sea un completo idiota. No puedes cargar con eso—

—No lo entiendes —replicó Luther, la frustración elevando su voz—. ¡Él es nuestro padre! ¡Se supone que debería haber estado ahí! ¿Y ahora qué? ¿Voy a seguir buscando sus benditas respuestas en cartas que nunca leyó?—

Jayden, viendo cómo la angustia de Luther se intensificaba, trató de buscar un punto de conexión, pero ella odiaba a Reginalds, no le sorprendía. Aunque no pudo evitar recordar que Luther fue por la única persona por la que su padre le preguntó, no tenía sentido, ¿Cuál fue el verdadero motivo? Su padre era un hombre práctico, ninguna de sus decisiones era deliberada, debía tener alguna lógica haberlo enviado a la luna, aunque no podía verla.

Diego rodó los ojos. —No hay excusas. A veces la gente simplemente es... horrible. No quiero decir te lo dij...—Jayden golpeó su hombro antes de que pudiera terminar su frase, el latino se quejó y ella negó con la cabeza, ella no era ejemplo de consuelo, pero no podía tener tan poco tacto.

—Debe darme respuestas, ¿Por qué me envió allá? ¡Lo sacrifiqué todo por él, mi vida entera! ¡No salí de casa, no tuve amigos!— gritó poniéndose de pie tambaleando. SpaceBoy salió corriendo dando un portazo.

Diego resopló, él siempre supo cómo era su padre, era hora de que Luther lo entendiera, aunque tal vez era mucho para asimilar.

—¿Debemos ir tras él?—preguntó con esceptisimo viendo a Jayden de reojo.

T1 Loving any of us is a death sentence, isn't It?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora