ENTRELAZADOS

CAPITULO 18

"Ni siquiera me gustas,

¿Por qué quieres venir y hacerme

Sentir de esta manera?

Voodoo doll by 5SOS

Elizabeth

Las manos de Anna pasan sobre mi pecho, causando que mi cuerpo se estremezca debido al contacto. Ella se percata y rápidamente las aparta, me mira en busca de que le diga algo, sin embargo, me mantengo callada y solo le doy una sonrisa apenada.

- ¿Cariño, te duele? – Sus palabras parecen tener más significado del que es, aunque tal vez sea cosa mía, así que lo ignoro.

- No. Estoy bien, Anna. – El escuchar su nombre saliendo de mis labios, parece tranquilizarla. Me recuesto un poco, dejando que Anna se encargue de mi pecho. - ¿Podrías abrir la ventana? – Esta vez mis palabras se dirigen al Rey, que se encontraba cómodamente recostado en su silla. El parece no escucharme o lo finge ya que no se mueve.

- Querido ¿Ahora estas sordo o acaso estas ignorando a tú esposa? – Su abuela lo molesta, lo que solo saca una risita de mi parte. El me mira irritado, como si fuera mi culpa que lo vuelvan a regañar. – No me hago más joven esperándote, Liefde. –El apodo solo consigue sacarme otra risa, la cual podría escucharse en todos los reinos de ser posible.

Cosa que no tuve que hacer, ya que el esfuerzo me hace doler el pecho y es el sonido lastimero que sale de mi garganta que los hace verme. Ahora es el Rey quien se ríe, como si mi dolor le diera satisfacción. Le lanzo una mirada de pocos amigos, lo que solo le saca otra risilla. Que molesto.

-Yo tampoco me hago más joven esperándote, Liefde. – Aunque es difícil de pronunciar igual lo utilizo, solo para poder sacarlo de sus casillas, sin embargo, no lo logro. Aquello solo lo hace sonreír más. - ¿Disculpa que es tan gracioso?

- ¿Si quiera sabes que significa Liefde? – Me mira altanero.

- No, pero suena chistoso. – Me encojo de hombros. Mi respuesta le saca una risa a su abuela, y una media sonrisa a él. – Me estoy asustando. Alguien podría decirme que significa.

- No es nada malo, querida. – Ella acaricia mi rostro con dulzura. – Es un término cariñoso que usan las parejas en Dubois. Nada de lo que preocuparse. Suelo decirlo porque a mi nieto no le gusta mucho aquel término. – Vuelve a su tarea en mi pecho, dejándome más confundida.

- ¿Qué significa, Dubois? – Esta vez me dirijo a su nieto, quien solo me sonríe altanero.

- Bastián estaría bien. Aunque preferiría que me llamaras Liefde. – Es la única respuesta que me da, antes de dirigirse a lo que supongo es el baño de su abuela. Su abuela lo sigue con la mirada, en sus ojos puedo observar la más pura de las sorpresas, después aparta su mirada y mientras niega una sonrisa sale de sus labios.

- Liefde significa Amor.– Regreso mi mirada a Anna, quien sigue concentrada en su labor en mi pecho. Aquello que dice hace que mis cejas se levanten demasiado debido a la sorpresa. - Suele usarse en Dubois porque uno de nuestros antepasados llamaba así a su esposa de ascendencia desconocida, él no sabía su idioma, pero la primera palabra quiso aprender por ella fue Liefde. Digamos que una muestra de que, aunque no sabía el idioma, igual aprendería todas las palabras románticas por ella. Por eso solemos usarlas con nuestra pareja. Es como una tradición.

Es la breve explicación que me da Anna antes de que su nieto vuelva a tomar asiento en la silla. Sigue trabajando en mi pecho, como si no hubiera dicho nada. Mientras que yo no dejo de pensar en lo que me dijo. El sonido de una ventana abriéndose llama mi atención. El rey abre la ventana para luego ir a sentarse en su silla. Desde mi posición puedo ver un poco del cielo iluminado, y es solo aquello que alivia mi tensión. Imaginar cuál es la historia detrás de cada estrella que ilumina el cielo, me relaja un poco.