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Junhui se sentó en el sofá, el corazón latiendo acelerado mientras miraba la pantalla de su teléfono. Había decidido que necesitaba ayuda, así que escribió un mensaje a Wonwoo, consciente de que lo que estaba a punto de pedir era un poco fuera de lo común. “¿Podrías fingir que seguimos juntos durante la cena con mi madre y mi hermano? Solo por esta vez.”

Después de un breve momento de espera, su teléfono vibró con la respuesta de Wonwoo: “Claro, lo haré. Siempre he tenido cariño por tu madre y Chan.” Junhui sintió un alivio que no esperaba. Era un gesto amable de parte de Wonwoo, y aunque no podía evitar la tristeza que venía con el recuerdo de lo que habían perdido, estaba agradecido de que aún existiera esa conexión.

El día de la cena llegó. La mesa estaba decorada con un centro de flores frescas, y Junhui se aseguró de que todo estuviera perfecto. Cuando su madre y su hermano llegaron, la atmósfera era tensa pero cordial. Al principio, todo iba bien. Junhui y Wonwoo intercambiaron sonrisas y comentarios cariñosos que parecían genuinos a los ojos de su madre.

Sin embargo, a medida que avanzaba la noche, Junhui comenzó a sentirse abrumado por las sonrisas y risas fingidas. En un momento, Chan, su hermano menor, le pidió a Junhui que lo acompañara al balcón.

—Necesitamos hablar —dijo Chan con seriedad mientras miraba hacia el horizonte.

Junhui asintió, intrigado. Cuando llegaron al balcón, la brisa nocturna les dio un respiro. Sin embargo, la preocupación en los ojos de Chan no pasó desapercibida.

—Jun, mi madre ya sabe todo —dijo Chan de manera directa—. Wonwoo habló con ella el día que terminaron.

El estómago de Junhui se hundió al escuchar eso. No sabía cómo había manejado Wonwoo esa conversación, pero la idea de que su madre estuviera al tanto de su ruptura lo golpeó con fuerza.

—¿Y qué dijo? —preguntó Junhui, su voz un susurro.

Chan miró a su hermano con seriedad. —Dijo que se había encariñado mucho con Wonwoo. Ella pensó que podrían seguir juntos. Pero yo no estoy de acuerdo. Sé cuánto has sufrido por todo esto. No quiero que pienses que eso puede suceder.

Junhui sintió que su corazón se encogía. Había querido proteger a su madre de la verdad, pero Chan era directo y no se andaba con rodeos.

—No sé qué hacer, Chan. Esta cena… solo la hice para evitar el drama, pero siento que todo se está desmoronando de nuevo. No quiero mentir más.

Chan lo miró con comprensión. —No tienes que seguir haciendo esto. Eres más fuerte de lo que piensas. Y Wonwoo también. Si mamá está encariñanda con él, es porque ve algo en él que aún no has dejado ir. Pero tú tienes que ser honesto contigo mismo.

Junhui respiró hondo, asimilando las palabras de su hermano. La verdad era que, a pesar de lo que había sucedido, todavía había una parte de él que se aferraba a lo que habían tenido. Y al mismo tiempo, era evidente que era hora de cerrar ese capítulo.

—Tal vez debamos hablar con ella después de la cena. Decirle la verdad. No quiero que siga aferrándose a una relación que ya no existe.

Chan asintió, aliviado por la decisión de su hermano. —Eso suena bien. No es justo para ninguno de los dos seguir actuando.

Cuando regresaron al interior, Junhui sintió que el peso de la conversación con su hermano había traído claridad a su mente. Tenía que ser honesto, tanto consigo mismo como con su familia. La cena podría ser un último acto de cortesía hacia su madre, pero lo que verdaderamente importaba era cómo avanzarían a partir de ahí.

let me hold you [Junhao]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora