21

27 4 3
                                        

Al día siguiente, Minghao llegó a la universidad con una determinación diferente. Después de pensarlo la noche anterior —mientras se debatía entre la necesidad de más café o dormir— había decidido que lo mejor era intentar algo diferente con Junhui. Estaba cansado de las mismas noches en el club, del mismo camino hacia su apartamento, y de la rutina que, aunque placentera, comenzaba a sentirse vacía.

En cuanto llegó al campus, buscó a sus amigos para contarles su decisión. Los encontró en su lugar habitual, una banca en el patio donde siempre se reunían antes de clases.

—¿Ya te decidiste? —preguntó Seungkwan al verlo acercarse, como si pudiera leer su mente.

Minghao asintió con una sonrisa nerviosa.

—Lo voy a hacer. Voy a invitarlo a salir, pero fuera del club, a ver qué pasa. Ya no puedo seguir con esta incertidumbre.

—¡Sabía que lo harías! —exclamó Seokmin, dándole una palmada en la espalda—. Eso es, Hao. Lo peor que puede pasar es que diga que no, pero al menos sabrás dónde estás parado.

—Sí, pero... —Minghao bajó la voz, sintiendo la presión de sus propias palabras—. ¿Y si no quiere? ¿Y si todo se arruina después?

Vernon intervino.

—Si realmente quiere estar contigo, no lo va a arruinar. Si no está dispuesto a intentarlo fuera del club, entonces tal vez no estaba tan interesado en ti como tú en él. Pero al menos lo sabrás.

Eso resonó con Minghao. Era cierto, aunque le costara admitirlo. Tenía que saber si Junhui estaba tan interesado en él como para sacarlo de esa burbuja nocturna en la que ambos se habían encerrado.

Seungkwan añadió:

—Además, siempre puedes invitarlo a hacer algo que no sea tan serio. No tiene que ser una cita romántica de inmediato. Podrías empezar con algo casual, como ir a comer después del trabajo, o incluso una tarde en la ciudad. Eso podría aliviar la presión.

Minghao lo pensó por un momento y asintió.

—Tal vez tengas razón. Algo casual podría ser una buena forma de empezar.

Seokmin sonrió, satisfecho con la resolución de Minghao.

—Eso es, Hao. Hazlo a tu manera. No necesitas seguir un guion ni apresurarte. Si Junhui vale la pena, va a querer conocerte más allá de las noches en el club.

Con esa seguridad renovada, Minghao se dispuso a prepararse para la noche. Sabía que sería complicado abordar el tema con Junhui, pero al menos tenía un plan. La incertidumbre seguía allí, pero estaba decidido a enfrentarse a ella.

---

Esa noche, cuando Minghao terminó su turno en el club y fue a cambiarse en el camerino, sintió un nudo en el estómago. Sabía que Junhui lo estaría esperando afuera, como siempre. Era una rutina, y eso lo reconfortaba, pero al mismo tiempo, esa familiaridad lo hacía sentirse atrapado. Se miró en el espejo, ajustándose la chaqueta. Era ahora o nunca.

Cuando salió, Junhui estaba allí, apoyado en su auto esperándolo como de costumbre. Le sonrió al verlo, ese tipo de sonrisa que siempre hacía que el corazón de Minghao latiera más rápido.

—¿Listo? —preguntó Junhui, abriendo la puerta del auto para él.

Minghao asintió, pero en lugar de subir de inmediato, se quedó allí, de pie junto al auto, sintiendo cómo el nudo en su estómago se hacía más grande.

—Jun, quiero preguntarte algo —dijo finalmente, con la voz un poco temblorosa.

Junhui lo miró, sorprendido por el tono de Minghao. Casi nunca hablaban seriamente después del trabajo. Todo era más ligero, más relajado.

—Claro, dime —respondió, dejando de lado su actitud despreocupada y mirándolo con atención.

—¿Te gustaría hacer algo fuera del club? —preguntó Minghao, apretando los puños dentro de su chaqueta—. Ya sabes, algo diferente. No sé, podríamos ir a cenar o... algo así.

Junhui lo miró en silencio por un momento, como si procesara la pregunta. Luego, una sonrisa suave se dibujó en su rostro.

—¿Te refieres a una cita? —preguntó, con una chispa de diversión en los ojos, pero sin burlarse.

Minghao tragó saliva y asintió, sintiendo que su corazón estaba a punto de salirse de su pecho.

—Sí, algo así. Solo que... no tiene que ser nada serio. Solo... quiero pasar tiempo contigo fuera de este lugar.

Junhui sonrió más ampliamente y se acercó un paso hacia él.

—Me parece una buena idea, Hao. Hace tiempo que he pensado lo mismo. Me sorprende que hayas sido tú quien lo propusiera primero.

Minghao sintió una mezcla de alivio y nervios cuando escuchó eso. Todo parecía más fácil ahora, pero también más real.

—¿Entonces te parece bien? —preguntó, queriendo estar seguro.

—Por supuesto —respondió Junhui, inclinándose para besarle suavemente la frente—. Me encantaría. ¿Qué tal mañana?

Minghao asintió rápidamente, sintiendo una ola de emoción. No estaba seguro de qué iba a pasar después, pero al menos había dado el primer paso hacia algo más con Junhui.

Aay estoy emocionada por junhao primera citaaa

let me hold you [Junhao]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora