Ojos color cielo, mirada azul de mar, plateados ya los cabellos pues de tan rubios y tan bellos el tiempo cogió celos y los tuvo que ocultar.
Regaló el oro de su pelo al tiempo y a la vida, a cada sueño y a cada despertar, a dos hijos que amamantó ternura y a un hombre que nunca la dejó de amar
Dama de la mirada triste, ojos color de mar. Una estrella se dejó un beso olvidado entre tu boca y el cielo, y ese beso es un lunar que de sensualidad viste su sonrisa y su besar.
Ojos color cielo, si la vida de él me aparta buscaré en tu mirada mi playa, mi calma... mi mar.
Dedicado a Antonia Gil.
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el cementerio de los versos perdidos
PoetryEste libro está dedicado a todos aquellos que todavía creen que las palabras son el lenguaje de la belleza, la música el idioma del alma, y un beso el único lenguaje válido allí donde no llegan ni las palabras ni la música. A quienes juran qu...