No puedes evitar que el sol y la luna se encuentren.
▼El amor prohibido, que destruyó a toda la Galaxia. Un Jedi y una Reina no puede estar juntos. Ni separados. ▼
Historia 💯 % mía
No esta completamente basada en la Historia de Star Wars solo co...
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Nerys, a cambiando tanto su mirada era otra no negaré que mi corazón se aceleró al verla de nuevo de verdad, estaba más hermosa.
Su caminar era lleno de autoridad y elegancia.
Era otra persona, pero sus ojos parecían tan tristes como si vivir aquí fuera un tormento para ella, era como si cargara con una culpa.
Y lo hacía por haberme abandonado.
— ¿Así que este es su palacio majestad? — preguntó asombrado Kenobi observando el enorme lugar — Es demasiado grande.
Su majestad, vaya lugar humilde donde vive.
— Obi-Wan, desearía que solo me llamaras Nerys o maestra Valeut — dijo suavemente, algo que provocó que Anakin alzara una ceja confundido por su repentino cambio de actitud — Si es que aún me consideran, así en la Orden.
— No te preocupes Nerys, para la orden Jedi siempre serás la maestra Valeut — pronunció amablemente para después voltear a ver a Anakin y lanzarle una mirada de advertencia — ¿Verdad Anakin?
Creo que ni siquiera estaba escuchando muy bien, me había perdido de su plática, era como si pudiera escuchar las voces de alguien más, y trataba de sentir a mi esposa mediante la fuerza.
Pero era casi imposible en este lugar.
Este palacio es algo extraño, es como si la fuerza estuviera en todos lados, se sentía frío.
— Matt te extraña — el ni siquiera podía creer lo que acababa de decir en ese momento, tanto que se reprendió internamente lo había dicho, sin siquiera pensarlo.
Al ver que la tuteé vi como sus ojos se abrieron demasiado y el brillo de sus orbes oscuros, al parecer la noticia la puso feliz sus expresiones lo decían todo en este momento. Jamás había visto a Nerys así al parecer al único que extraño fue a ese niño.
— ¿Matt, el esta bien? — preguntó apresuradamente con una leve sonrisa, algo que ella trato de ocultar aunque no podía evitar ponerse feliz por eso.
— La maestra Unduli lo ha estado entrenando. — pronunció tranquilamente, mientras seguían caminando por los enormes pasillos — Aunque debo admitir que todo el mérito te lo llevas tú, lo entrenaste duramente durante dos años. Y de manera estricta, algo que yo con Anakin tarde en hacer.
— ¡Obi-Wan! — dijo algo indignado el caballero Jedi de cabello más largo — Usted llegó a jalar mi trenza, solamente, porque no le hacía caso. Al menos la reina Nerys entrenó a Sierlad con algo de cariño.
Claro que me di cuenta perfectamente que al nombrarla de esa manera pareció incomodarse demasiado, le había prometido a Padme que estaría lo mas frío y distante.
