Recuerden que ustedes me aman y yo a ustedes, por lo que no me pueden matar, porque sino se quedan sin libro.
☆☆☆☆☆☆☆
Guerra de sangre.
Amaia Meyer.
Salgo de la oficina de Azrael y me dirijo a la mía sin reparar a nadie, estos días no teníamos tiempo para absolutamente nada, y eso incluía los polvos. Cosa que claramente me tenía de mal genio. Me subo al ascensor encontrándome con Karly.
—Es extraño verte por aquí —comento cuando las puertas de metal se cierran.
Ella me sonríe.
—Milán vendrá a la central.
Poso mis ojos sobre ella.
—No sabía que ya había vuelto —mis hombros se relajan, ya que si ella ha vuelto el orden se va a restaurar—. Al menos está central ya no parecerá un puto gallinero.
Mueve la cabeza de un gesto afirmativo dándome la razón.
—Aprovechando que estamos aquí, ¿Qué haremos para su cumpleaños?
—Lo mismo de siempre —me encojo de hombros—. Drogarnos y emborracharnos hasta perder la conciencia. Follar es una opción pero no creo que tu hermano se le despegue.
Sonríe negando con la cabeza, y yo simplemente ruedo los ojos. El cumpleaños de Milán estaba a tan solo una semanas, pero claramente a ella eso no le importaba, puesto que en estos momentos su mente solo estaba para el operativo.
Y para Kalum claro está.
—Ya en serio debemos hacer algo nuevo para su cumpleaños —comenta pensativa—. A estas alturas ya ni recuerdo qué fue lo que hicimos el año pasado.
—Ese es el punto —blanqueó los ojos—, a Milán no le interesa nada más que embriagarse. Y follarse a Kalum. —me da un golpe en el brazo—. No creo que hagamos nada porque estamos en medio de un operativo.
El ascensor se detiene y las puertas se abren, salgo ya que es el piso donde se sitúa mi oficina, giro sobre mi propio eje fijando los ojos en Karly, quién se mantiene de brazos cruzados.
—Te llamaré para que entre las chicas y nosotras, planeamos algo para Milán.
Las puertas del ascensor se cierran y yo me rumbo a mi oficina. Karly no se iba a rendir, claramente quería celebrar el cumpleaños de Milán, pero si eso incluía, alcohol, follar y drogas sería el plan perfecto. Uno al cual no me negaría.
Teniendo en cuenta que ni siquiera recordábamos lo que habíamos hecho el año pasado, ya que no solo se juntaba su cumpleaños, sino que el de su hermana Christina, por lo que era doble celebración.
Doble locura, doble explosión y el doble de desmadre. Solo que este año sería un poco más divertido, ya que conociendo a mi amiga sabía que no se iba a quieta. Además tenía un ligue psicópata pegado a ella a cada hora del puto día, por lo que sería más divertido el asunto.
—Ay Milán, tu cumpleaños seguro terminará peor de explosivo que el anterior —comento para mi.
Entro a la oficina y mis ojos van directamente hasta la secretaria, quién parece un tómate puesto que mi presencia le incomoda, y eso es algo que noto al instante.
Me cruzo de brazos dejando que mi espalda caiga sobre el respaldar de la silla, cuando tomó asiento para empezar mi trabajo, ya que el operativo se ha retrasado por múltiples razones.
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Tentando a un Demonio [+21]
ActionTienen que entender una cosa. A mi nunca nadie me jode y no los dejo creer que pueden conmigo, por que mejor que yo no seran. Puedes creer lo que quieras pero nunca seras mejor que yo. Entiende que a mi nadie me toca y él que lo haga se muere. ...