Las tres nos dirigimos sigilosamente a la entrada cuando Rose se chocó contra la pared mirando asustada hacia atrás y un ruido hueco sonó por todo el pasillo central. Se eacucharon los pasos del conserge acercarse cuando escapábamos por el jardín lateral corriendo pero sin hacer ruido y nos escondimos en la esquina.
Apoyamos la espalda y las manos en la pared y escuchamos al conserge decir que extraño y rascarse la cabeza. Cuando se fue a dar la vuelta Rose estornudó y el conserge se acercó rápidamente a la esquina en la que estábamos.
Para colmo Emma empezó a hiperventilar y tuve que taparle la boca para que no hiciese aspavientos.
El conserje apoyo su mano en la esquina pero el muy despistado no miró en ella y creyó que lo ocurrido eran imaginaciones suyas o una tomadura de pelo. Al oirle irse solté mi mano de la boca de Emma y me dejé caer en el suelo resbalando mi espalda por la pared.
Dios mio que intenso llevé mis dedos a mi nuca y a la frente y suspiré bien fuerte.
¡Vaya oportuna es Rose!Después de cinco minutos de silencio Emma rompió a hablar de cosas como el gato de su mansión y cosas así.
Decidí seguir con el plan.
Así que nos dirijimos a Laguna negra.
Una vez allí buscamos un lugar por el que entrar y no fue difícil la verdad. Emma encontró una puerta vieja y oxidada que estaba abierta, y por allí pasamos.
Me extrañaba mucho la semejanza de los dos internados todo parecía igual...
Encontramos la habitación de Nick y un tal Elliot? Si eso jeje Elliot.
Nick se alegró muchísimo de vernos la "visita rápida" se alargó un poco.
Estuvimos hablando de lo sospechoso que resultaba todo, cuando una bombillita se iluminó en mi cabeza... Haber como se lo digo... Es importante para mi que sepa esto...
-Nick... Yo... Querría perdiros a tus amigos y a ti un enooorme favor...- dije tragando saliva.-Bueno... Verás... La cara de sapo osea mi directora se enfadó muchísimo al vernis hablar con vosotros y yo quisiera saber por qué así que he pensado que si me buscáis información sobre buestro director las cosas nos serían más fáciles ¿no? -dije bastante abrumada y apurada.El aceptó de buena gana y seguimos hablando y nos fuimos a las cinco y media de la mañana... Hemos hablaado tantísimo que se nis pasó el tiempo.
Regresamos a la celda y nos dormimos para quedar libres de sospecha.
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En manos del destino.
Ficção AdolescenteNick se acercó a mi. Me tendió su mano. -¿Me concedería estos tres bailes señorita?- me preguntó caballerosamente. Yo me levanté y me incliné y le respodí -Sería un placer - le dije agarrando su suave mano con cuidado. ¿Porqué acepté? Ni yo misma lo...