mvp-----Hecbasí

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El partido había terminado, y Pau Cubarsí había sido nombrado MVP tras un desempeño brillante en el campo. Había defendido cada balón con intensidad y precisión, ganándose el reconocimiento de sus compañeros y entrenadores. Mientras el equipo regresaba al vestuario, aún resonaban los gritos de celebración y las felicitaciones de todos.

Héctor, con una sonrisa de orgullo, miró a Pau desde el otro lado de la sala. Ambos compartían una amistad tan cercana que todos en el equipo bromeaban con que parecían inseparables, y Héctor estaba feliz por el logro de su amigo.

Sin pensarlo, Pau corrió hacia Héctor y, riendo, lo abrazó por los hombros con fuerza, incapaz de contener su emoción. Héctor, sin dudarlo, le devolvió el abrazo, pero en lugar de hacerlo de manera casual, deslizó sus brazos alrededor de la cintura de Pau y, en un movimiento rápido, lo levantó en el aire.

Pau soltó una risa sorprendida, agarrándose de los hombros de Héctor mientras sus pies quedaban a varios centímetros del suelo. "¡Héctor, bájame!" exclamó entre risas, intentando disimular el sonrojo que empezaba a aparecer en su rostro.

Los compañeros que los rodeaban empezaron a reír y a lanzar bromas al ver la escena. Ferran no tardó en hacer un comentario en tono burlón: "¡Ya suéltalo, Héctor! No se lo vayas a llevar a casa así." Mientras tanto, Balde añadió: "¡Parece que Pau pesa menos que una pluma para ti!"

Ambos, aún riendo, ignoraron las bromas, y Héctor bajó a Pau suavemente, pero sin soltarlo del todo. En cambio, lo dejó frente a él, todavía con sus manos en su cintura. Pau, con el rostro encendido y una sonrisa amplia, le dio un pequeño golpe en el hombro, aunque en el fondo no quería que se alejara.

"Lo siento, MVP," dijo Héctor con una sonrisa juguetona. "Tenía que celebrarlo a lo grande."

Pau le devolvió la sonrisa, sintiéndose extrañamente cómodo en los brazos de Héctor y, por un segundo, olvidándose de los comentarios y risas de sus amigos. Al final, no necesitaban decir nada. Ambos sabían que había algo especial en ese abrazo, algo que los hacía sentir más cercanos que nunca.

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