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El evento más importante para muchos apasionados de las artes marciales o el bello arte de partirse las caras en general, estaba en vivo luego de algunos días de peleas repetidas y el repentino ascenso en popularidad de la nueva joven promesa proveniente de Osaka. Muchos pudieron presenciar la increíble batalla entre el Japan Team y el Rivals Team, pero un pequeño sector de las tantas no tenían tanto interés en esta lucha, si no en la siguiente.

Ese pequeño sector eran las personas que el joven Shingo Yabuki ha establecido un lazo con ellos, los chicos de Southtown, Mai Shiranui, Athena Asamiya y no olvidar tampoco, sus propias hermanas.

Aunque todos ellos no estaban juntos en un mismo lugar, eso no era nada ya que no les impedía de apoyar al único Superviviente en hacer tal run histórica desde que se implementó la sección Survivor al torneo.

-¡Finalmente! ¡Estas muy cerca muchacho, muestrale al mundo de que esta hecho ese tigre en tu interior!

Big Bear canceló muchas posibles oportunidades en su agenda para este momento, no quería perderse para nada a ver su discípulo pelear junto a sus amigos de Southtown quienes compartían una cerveza con él.

Al mismo tiempo, una vuvucela resonaria por todo el recinto Shiranui, siendo la heredera del Clan quien se encontraba frente a la televisión con algunas frituras apoyando a su enamorado como si fuese un partido de fútbol.

Athena Asamiya se encontraba emocionada viendo con sus compañeros de equipo la televisión, su maestro como siempre bebía cantidades exorbitantes de alcohol mientras Kensou aunque no quisiera ver al hombre que conquistó a la chica de sus sueños, no pudo evitar que la curiosidad le pegase al ver como seria su enfrentamiento.

-¡Go, go! ¡Shingo!

Sus hermanas también se encontraban alentando a la televisión fervientemente mientras la espera continuaba, su hermana mayor aunque agotada por su trabajo en la oficina se digno a ver a su hermano menor pelear, de paso, la menor de los tres logró encontrar una vieja camiseta que se hizo para apoyar a su hermana Sayuko cuando aún competía en Karate.

La camiseta era algo muy simple siendo solo de un color sólido azul y con letras blancas qué repetían tanto por delante como por atrás "Go Yabuki!" en una señal de apoyo, hubo suerte que no especificaba cual de los tres hermanos era así que podían usarlo cuantas veces quisieran para apoyarse mutuamente.

Pero suficiente de saber lo que todos intuían, con mucha gente mirando, cámaras por todos lados y un deseo creciente de victoria. Shingo Yabuki, el joven que ha impresionado a muchos con su desempeño en este torneo, se acercaba al lugar de lucha, al ser todo en un mismo día, el mismo escenario sería la fábrica abandonada.

Estirándose, el chico fijaba su vista en su oponente, un joven adulto de pelo rojo y quien le daba la espalda con claro desinterés. Estaba claro que él lo subestimaba, una persona a quien darle la paliza de su vida y poco más.

Ahora él debía de mostrarle lo contrario, que sus habilidades no debían ser menospreciadas por nadie más que por él solo, porque conociéndose, sabía que él mismo se auto criticaría.

El pelirrojo finalmente se daría la vuelta, no diciendo ninguna palabra y solo optando por estar ya en posición para la "corta" lucha que tendría por delante. Shingo no se quejaría de ello, tomando también su posición de combate luego de quitarse la chaqueta escolar.

La primera lucha en vivo y en directo para el joven castaño, la mirada de muchos espectadores y conocidos se posaban ahora mismo en él quien tenía el único objetivo ahora mismo de no decepcionarlos, pero a su vez dos personas decidieron ver su lucha entre las gradas, siendo estos Benimaru Nikaido y Goro Daimon.

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⏰ Última actualización: 4 days ago ⏰

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