Bruno miró a Sofía con ternura mientras acariciaba suavemente la cabeza de Micaela , que dormía plácidamente en sus brazos. "Micaela se durmió", le dijo en voz baja, sin querer interrumpir la calma del momento. "Parece relajada, ¿no?"
Sofía, observando a su hija, sonrió con una mezcla de felicidad y alivio. "Sí, parece estar tranquila", respondió mientras acariciaba suavemente la mejilla de Micaela . "Es increíble cómo puede dormir tan profundamente en tus brazos, con todo lo que hemos pasado."
Bruno asintió, dejando escapar un suspiro de satisfacción. "Es nuestra pequeña, Sofía. Está a salvo con nosotros. Lo mejor es que, por un momento, no tenemos que preocuparnos de nada más."
Sofía se recostó contra el hombro de Bruno, dejando que el sonido relajante del agua y la paz del momento se apoderaran de ella. "Sí, es lo único que importa", murmuró, su voz casi perdida entre el suave murmullo del agua y el cálido abrazo de su familia.
Mientras observaban el espectáculo de luces en el agua, se dieron cuenta de que, aunque las circunstancias no siempre fueran fáciles, siempre tendrían el uno al otro y, con Micaela , un motivo más para seguir adelante.
Sofía, recostada junto a Bruno, acariciaba suavemente su brazo musculoso, sintiendo la firmeza y la calidez de su piel. El gesto, aunque pequeño, estaba lleno de ternura, de un cariño silencioso que hablaba más que las palabras. Bruno, notando su toque, la miró de reojo, sus ojos reflejando la tranquilidad de ese momento.
"Te quiero mucho, Sofía", le dijo en voz baja, con una sonrisa que solo ella podía ver. "Gracias por estar siempre aquí, por estar a mi lado en todo esto."
Sofía le sonrió, sin decir nada, y siguió acariciando su brazo con suavidad. En ese instante, todo parecía perfecto: Micaela dormía en sus brazos, el agua danzaba suavemente frente a ellos, y no había nada que desearan más que estar juntos, en ese pequeño refugio que habían creado.
Después de un rato disfrutando del paisaje, Bruno miró a Sofía y, con una sonrisa, le preguntó: "¿Te gustaría ir a Burger King? Está cerca, y podría ser una buena manera de terminar el día."
Sofía asintió, una sonrisa se dibujó en su rostro. "Sí, claro, suena perfecto", respondió, feliz por la idea.
Bruno, con Micaela en brazos, se levantó y la acompañó hacia la salida. Sofía caminaba a su lado, sosteniendo a su hija con ternura mientras disfrutaban de una caminata tranquila hasta el restaurante.
Al llegar, se acercaron al mostrador y pidieron unas hamburguesas, papas fritas y refrescos. Se sentaron en una mesa junto a una ventana, donde podían seguir observando el movimiento de la ciudad mientras disfrutaban de la comida. Micaela , aún dormida en los brazos de Bruno, parecía relajada y tranquila.
Mientras comían, Sofía miró a Bruno, su mirada llena de cariño y gratitud. "Es bonito poder hacer esto juntos, ¿no?" dijo, disfrutando del momento.
Bruno sonrió, mirando a su familia, y asintió. "Sí, lo es. Lo mejor de mi día es estar con ustedes."
Sofía, con una sonrisa, sacó su teléfono móvil y tomó una foto de Bruno sosteniendo a Micaela en brazos. La imagen capturaba el amor y la serenidad del momento, y sentía que era un recuerdo perfecto de ese día. Sin pensarlo dos veces, subió la foto a su cuenta de Instagram con una breve descripción: "Mi mundo en una foto 💕 #Familia #Amor"
Jazmín, que estaba navegando por las redes sociales, se detuvo al ver la foto en el feed de Sofía. Su rostro se oscureció al instante, y una oleada de odio y resentimiento la envolvió. Ver a Sofía tan feliz, con Bruno y Micaela , era más de lo que podía soportar. ¿Por qué ella tenía lo que yo nunca pude tener? pensó Jazmín, mientras sus dedos apretaban el teléfono con fuerza.
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Caminos cruzados 1
Mystery / ThrillerEntre el tiempo, los desafíos y los sueños de una vida nueva, Sofía y Bruno se enfrentan a un destino que les ha dado más de lo que esperaban, pero también les ha quitado mucho más. En un mundo donde la realidad y el futuro se mezclan, estos jóvenes...