Estaba en mi habitación cuando tocaron la puerta de la residencia...
"¡Ya voy!" —grité.
Bajé corriendo las escaleras, como siempre. Al abrir la puerta, me encontré con una linda y nostálgica sorpresa: era Sidney.
"¡Sid!" —dije, sorprendida y emocionada, y la abracé con fuerza. Sidney correspondió al abrazo, sonriendo cálidamente.
"¡Madison! Qué gusto verte" —dijo Sidney con una sonrisa que reflejaba el tiempo pasado desde la última vez que nos vimos.
"¡No puedo creer que estés aquí! Pasa, pasa" —la invité, haciéndole un gesto para que entrara.
Sidney entró y nos acomodamos en el sillón de la sala. "¿Cómo has estado? Hace tanto que no hablamos" —dije, aún incrédula por su visita.
"He estado bien, ocupada con los preparativos para la universidad y todo eso" —dijo Sidney, mirando alrededor—. "Ya casi un año desde todo lo que pasó en Woodsboro."
"Sí... No hemos sabido más nada de ellos, ¿verdad?" —pregunté, tratando de ocultar la preocupación en mi voz.
Sidney suspiró y sacudió la cabeza. "No... Ni un rastro de ellos. Espero que estén bien."
"También espero lo mismo" —dije, intentando cambiar de tema para aliviar la tensión—. "Y dime, ¿qué te trae a California?"
Sidney sonrió, animada por la pregunta. "Decidí venir a estudiar aquí. La universidad tiene un programa excelente y pensé que sería una buena oportunidad para empezar de nuevo y alejarme un poco de Woodsboro. Además, las clases aún no han comenzado, así que tengo algo de tiempo para adaptarme."
"¡Eso es genial! Yo estoy aquí con dos amigas más" —dije, señalando hacia las escaleras—. "¡Chicas! Bajen a saludar."
Betty y Verónica, en pijama, bajaron las escaleras, curiosas por conocer a nuestra nueva invitada.
"Hola" —saludó Betty tímidamente.
"¡Hola, Sidney! He oído mucho sobre ti" —dijo Verónica, extendiendo su mano.
"Encantada de conocerlas. Madison me ha hablado mucho de ustedes también" —respondió Sidney, estrechando sus manos.
Nos sentamos todas juntas y empezamos a conversar animadamente.
"¿Qué tal te ha parecido la universidad hasta ahora?" —preguntó Verónica.
"Me encanta. Los edificios son impresionantes, y he oído que los profesores son muy buenos. Es un alivio tener un nuevo comienzo después de todo lo que pasó en Woodsboro. Aunque siempre llevo esos recuerdos conmigo" —dijo Sidney con honestidad.
"Te entiendo. Pero aquí estamos seguras. Cualquier cosa, estamos juntas en esto" —dije, tratando de reconfortarla.
"Gracias, Madison. Significa mucho para mí tener amigas como ustedes aquí" —dijo Sidney, sonriendo agradecida.
"Y además, ¡aún tenemos tiempo para divertirnos antes de que empiecen las clases!" —dijo Betty con entusiasmo.
"Exactamente. Podemos explorar el campus juntas y conocer más el área" —añadió Verónica.
Pasamos el resto de la tarde hablando y poniéndonos al día. Fue un reencuentro lleno de emociones y promesas de un futuro mejor. La presencia de Sidney nos llenó de esperanza y nos recordó la importancia de la amistad y el apoyo mutuo.
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Scream Girl
HorrorMadison Blake, hija del Sheriff Blake, se muda a Woodsboro desde California para estar más cerca de su padre. Dejó su vida cómoda y normal en California, buscando comenzar de nuevo en esta pequeña ciudad marcada por la tragedia. Hace casi un año, Gh...