Capitulo 5

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Ana se encuentra en casa, esta sola, muchas veces camina por la bañera donde murió su esposo. Ella trabaja vendiendo cosas por Internet, su fallecido esposo y ella formaron un pequeño negocio por este medio. Camina por las habitaciones de sus hijos, primero pasa por el cuarto de el pequeño Steven, mira los juguetes por todo el piso. Ahora se encuentra viendo los dibujos que hizo su hijo hace mucho, en ellos están su padre, Jackie, ella misma y por supuesto Steven. En el paisaje se pueden ver un bosque, una cabaña y una bañera con un brazo ensangrentado saliendo de ella. Ana mira de cerca el dibujo y logra distinguir un reloj en la muñeca, el mismo reloj que llevaba Leonardo Stalyn. Se asombra al verlo y recuerda que ese dibujo lo hizo hace 3 años, mucho antes de que su esposo fuera asesinado.

Asustada pero no preocupada sigue su camino hasta llegar al cuarto de Jackie, siempre le gustaron los dibujos de su hija, el talento lo tiene de su esposo. Observa su ropero, su mesita de noche. Y se detiene justo en la pared donde Jackie cuelga sus diseños. Algunos son muy hermosos y otros algo confusos, sin embargo sigue observando. Se detiene al ver un cuadro, jamás lo había visto, al parecer es nuevo. En el se aprecia un cuarto de baño, las paredes un poco manchadas de color negro, en el espejo se observa un rostro difícil de distinguir, pero lo suficiente para saber que es un rostro femenino. Una mujer esta de pie observando la bañera, tiene un cuchillo en la mano izquierda, no se aprecia que ropa lleva o si esta la esta usando, ya que solo es la silueta de color negro. En la bañera hay un hombre, el rostro es demasiado claro... Es el rostro de Leonardo Stalyn y pareciera que esta pidiendo ayuda, tiene la boca abierta y los ojos en blanco. El agua de la bañera salpicando del color rojo de la sangre que sale de su cuello, ese dibujo es demasiado aterrador para contenerse, y se hecha a llorar, es demasiado impactante como para seguir viéndolo. 

Sale del cuarto de Jackie, aun aterrorizada al presenciar los dibujos de sus hijos. Llega a su habitación, se sienta en su cama y observa el sitio donde dormía su esposo, se recuesta sobre aquel lugar y lo huele, inexplicablemente puede presenciar el aroma masculino de su perfume. De un brinco se pone de pie, con los ojos abiertos puestos sobre la cama. Pone las manos en su cabeza y sacudiéndola se dice a si misma. _¡Esto no puede ser! . Entra a su baño y se lava la cara, se mira al espejo y ve en la bañera un brazo que se asoma, lleva el reloj de su esposo. Y con un rápido movimiento el cuerpo aparece, se levanta de la bañera y se coloca justo detrás de su esposa. Ana lo único que podía hacer es mirar y voltear para ver si no una alucinación. Se encuentra cara a cara con Leonardo, un escalofrió recorre todo su cuerpo al ver el corte que hay en el cuello, un corte de unos 14cm muy profundo.

_Hola Ana, te extrañe mucho. -Leonardo extiende los brazos para abrazar a su esposa-.

_No me toques, no existes, tu estas muerto. -Ana hecha unos gritos desgarradores-.

_Como puedes decir eso, ¿Acaso no me ves frente tuyo? -Entonces con el dedo corazón toca la frente de su esposa haciendo una X con sus dedos ensangrentados-.

Ana lo siente todo tan real, pero sabe que solo es una alucinación, no debería asustarse, pero aun así muere de miedo.

_Esto no puede estar pasando, Leo por favor vete. -Esta llorando desconsoladamente de los nervios-.

_No me iré sin antes darte un abrazo.

Entonces Leonardo se acerco al cuerpo de su esposa, abrió los brazos y los apretó al cuerpo, casi dejándola sin aire.

_Su. S..suéltame Leo. Me aprietas muy fuerte. -Ana lo dijo entrecortando la respiración-

_Silencio! No se cuando podre volver a hacerlo de nuevo. 

Leonardo luego beso el cuello de su esposa, dejándole una gran marca de sangre, se extendía a la altura de sus orejas hasta la otra. Leo regreso hasta la bañera de donde minutos antes había salido. Se sentó, colocando todas las partes de su cuerpo delicadamente, se marcho, sin antes decir unas ultimas palabras.

_TE PERDONO.

Ana salió del baño, se miro frente al gran espejo de su ropero, vio que su cuerpo tenia manchas de sangre, alzo la cabeza y vio la otra gran mancha de sangre de su cuello. Cerro los ojos gritando porque todo esto halla sido solo un producto bizarro de su imaginación. Pero no era así ¿ como se explicaban las manchas de sangre? Otra vez rompió en llanto, agarro sus pastillas y se metió unas 4 a la boca. Bajo a su sala, se sentó en su mueble y finalmente se quedo dormida.

Dulces SueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora