Me sentía atrapada.
Abrí los ojos, y era verdad. Estaba atrapada por unos brazos.
Giré un poco mi cabeza y me di cuenta de que era Jesús.
Ya no me acordaba de que al final se quedó a dormir conmigo.
Me liberé de su agarre y salí silenciosamente de la habitación.
Bajé a la cocina donde no había nadie y me preparé un nesquick.
Mientras desayunaba en la mesa del salón/comedor vi en el reloj que eran las diez de la mañana.
-Que silenciosa eres.- pegué un salto de la silla. Sentía como el pijama se me pegaba a la piel. Bajé la mirada. El nesquick se me había derramado encima.
-Agh, genial.- mascullé. Miré al que me pegó el susto.- Gracias Jesús. Te quiero.- dije irónicamente.
-Perdón, no quería asustarte.- se encogió de hombros.
-Da igual, no pasa nada.- suspiré.- Voy a cambiarme. Ya desayunaré luego.- dije mientras iba a la cocina a por papel para limpiar la leche que había derramada por toda la mesa.
-A las once Dani y yo nos vamos a ir a la piscina de Teresa, ¿vienes?
-Vale.
(...)
-Hola.- los dos la abrazaron. Yo me quedé mirándolos.
-Ah Tere, ella es _____, una amiga.- le dijo Jesús.
Auch, eso dolió.
-Hola, yo soy Tere.- nos dimos dos besos.- Bueno, vamos a dentro.
Extrañamente y por suerte llevaba un bikini en la maleta y me lo puse en casa de los gemelos.
Era de estos que se llevaban ahora, de color fluorescentes con lineas negras. Especialmente verde agua.
Estábamos en el jardín de Teresa. Yo, por mi parte, un poco incómoda, nunca había estado aquí.
Danisú y Teresa ya se habían adelantado y estaban nadando en la piscina.
Me quité el short y la camiseta. Me recogí el pelo en un moño improvisado, empezaba a hacer calor. Dejé a un lado las chanclas y me acerqué a las escaleras de piedra.
Probé el agua metiendo mi pie derecho pero estaba súper fría. ¿Cómo podían estar esos tres nadando tranquilamente?
-Venga ____. Que no muerde.- dijo Dani.
-Estáis locos, está congelada.- dije.
-Mete te, no seas quejica.- dijo esta vez Jesús. Lo miré con los ojos entrecerrados.
-Vamos, no tengas vergüenza.- dijo ahora Tere.
-Está bien.
Me fui metiendo poco a poco hasta que el agua llegó a la parte inferior del bañador.
Casi por inercia encogí la barriga. Me abracé a mi misma.
-Aquí estoy bien.- dije.
-¡Que dices! Venga pa' dentro.- dijo Jesús. Empezó a nadar hacia mi dirección.
-Jesús no, eh.
-A la de tres.- dijo.
-¿Qué?
-Una... Dos...
-Jesús que dices...
-¡Tres!- sentí como mi cuerpo se congelaba por segundos. Todos estaban echándome agua.
-¡No!- grité riéndome.- ¡Sois malas personas!- dije indignada.
Me tiré ya al agua para mojarme entera. Deshice el moño y salí a la superficie.
-Te juro que esta te la devuelvo Jesús Oviedo.- dije nadando hacia él.
-En realidad me quieres.- sonrió.
-Ahora mismo matar.- se puso serio.- ¡Porque me estoy muriendo de frío!
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Bueno, ya sabéis, si queréis capítulo 17 comentad a tope :)
Que sepáis que está muy interesante eh ;)
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No hay nadie como tú ~ Gemeliers y tú. Segunda temporada.
FanfictionOcho meses sin hablar con él. El chico del que me enamoré a pesar de la distancia. El cual tenía a casi todas en el bote, normal, es Jesús Oviedo. Él es, simplemente, perfecto. También, ocho asquerosos meses aguantando a mi padre hablar de los gemel...