What if (Kuroo) Parte 2

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>3< Aquí tenemos la siguiente parte de este final alternativo >3<

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No podía decir que todo hubiera sido muy perfecto desde que decidieron volver a intentar estar juntos, la verdad era que comenzó sintiéndose como algo más carnal que romántico. Aun así, era imposible que la dinámica que los persiguió por casi seis años no hubiera cambiado, ahora Kuroo pasaba más tiempo con ellos, iba de visita por las tardes y se quedaba a cenar muy a menudo, salían los tres juntos con más frecuencia y de vez en cuando el moreno también pasaba la noche con ellos, con él, en su dormitorio, por lo que era imposible que Hotaru no sospechara que algo estaba sucediendo cuando sus padres eran tan cercanos. En realidad, se dio cuenta más rápido de lo que los dos pronosticaron y aunque prometió ser discreta al respecto, al final de cuentas ella era una niña extremadamente feliz que no pudo soportar la alegría y la ilusión de imaginar a sus padres juntos, a los tres viviendo como una familia.

Una niña preciosa que no pudo resistir ir por ahí presumiendo lo buenos que sus padres eran uno con el otro, que pronto estarían juntos los tres.

Y sucedió exactamente lo que imaginó cuando todos se enteraron, estaban preocupados, nadie estaba de acuerdo, lo criticaron bastante más de lo que imaginó, usando palabras amables disfrazadas de preocupación para lanzar indirectas molestas. Estaban confundidos, inconformes y trataron de persuadirlo con mucha fuerza de abandonar esa insensatez, de convencerlo de abandonar a Kuroo.

Ya imaginaba que no lo tomarían muy bien, imaginaba que sería molesto y que tendrían mucho que decir, específicamente sus padres, sin embargo no pensaba que la situación se prolongaría lo suficiente como para que eligiera tomar un poco de distancia de ellos. Kuroo estaba bastante preocupado y triste por ese motivo, sabía que todos los odiaban bastante, especialmente el hermano del rubio, pero encontraron una forma de manejarlo. Sabían que lo mejor que podían hacer era seguir con sus vidas y ver hasta donde los llevaba esto después de todo. Era lo que habían decidido y sintieron que nadie más que ellos podían decidir si querían esto o no, así que siguieron adelante.

Porque su hija era feliz y, para ellos la felicidad de Hotaru era más importante también.

Comenzaron a asistir juntos a algunos eventos formales, el cumpleaños de sus sobrinos, el aniversario de bodas de los padres de ambos, fiestas de la compañía, a la boda de Akaashi, incluso, fueron a la fiesta de cumpleaños de su hijo, por lo que no podía decir que las cosas fueran mal entre ellos. Era todo lo contrario, Tsukishima se maravillaba cada vez más y más de como Kuroo podía manejar muy bien su rol como padre y Hotaru lo adoraba, era muy feliz y él se sentía cada vez más seguro de que los dos no habían hecho una mala elección al tratar de intentarlo otra vez. Eran un gran equipo y, a menudo Tsukishima sentía, cosas tan distintas...tan dulces en cada pequeño momento en el que perdían la noción del tiempo solo hablando de todo.

El pasado parecía realmente haber quedado atrás, no había recelo entre ellos y no era incómodo, aunque seguía siendo algo complicado por lo que decidieron mudarse juntos alrededor de tres años después. Los primeros días fueron momentos un poco delicados y bastante extraños para Tsukishima. Le daba un poco de miedo que todo volviera a ser como en el pasado, que Kuroo los hiciera a un lado o los viera como a algo no tan importante, sin embargo los dos ya no eran las mismas personas. Habían trabajado mejor su relación en el tiempo en el que estuvieron intentándolo, por lo que su comunicación era mucho mejor y su convivencia era mejor día con día.

Kuroo ya no se dejaba consumir por el trabajo, estaba con ellos en cada momento importante, les daba todo el valor en su corazón y no los dejó solos a él o a Hotaru jamás. Era tan diferente, tan bueno que fue muy fácil adaptarse a esa nueva rutina, al otro y sentir la seguridad que jamás pensó, comodidad y confianza mutua, de que siempre estaría ahí. Podían sonreír juntos, reían y no había más miedo, solo eso que era tan cálido.

Ruptura [Editado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora