Capítulo 20- La verdad al fin.

420 48 34
                                    

Uhhh. Se suponía que éste capítulo iba a ser publicado asher D: PERO después de los horrores técnicos de Wattpad y que se me borró todo a la hora de actualizar, me entró miedito, y no me quise arriesgar con éste capítulo también xd.

Pero los que sí me hicieron caso de hojear mis chistes de TMI -TID, estoy segura de que no se aburrieron muzo va xd.

Ennn fin. Ya los dejo con el chapter. Y sólo quiero advertirles que al fin van vana saber lo que hizo Clary.

Gracias y bai.

Capítulo 20- La verdad al fin.

A Clary no le quedó de otra.

Isabelle dijo que, si se arriesgaban a sacar a Simon en Idris, nada bueno iría a salir. En todo caso, las descubrirían, y pasarían a ser historia. Junto con el mundano.

Y cómo no podían llevar a Simon hasta el brujo, el brujo tenía que venir a él. Pero alguien tendría que ir a buscarlo, y cómo Isabelle no podía dejar a Max sólo en la casa. Y como tampoco confiaba mucho en la forma que Clary manejaba las cosas con Simon, decidió quedarse.

De modo que ahí se encontraba Clary, al pie de las caballerizas, intentando arrear al desorientado caballo de los Lightwoods, sin que nadie se diera cuenta.

Podría sonar realmente fácil, pero lo cierto era que no lo era ni por asomo. Isabelle nunca le advirtió a Clary de lo poco cooperativo que Isidoro podía llegar a ser, porque no lograba ensillarlo, y mucho menos, montarlo. Además, la muchacha siempre le había tenido mucha aversión a ese tipo de cosas, de modo que tampoco sabía mucho al respecto.

Corrección; no sabía nada.

Al principio, Clary iba a subirse a lomos de golpe sobre Isidoro, pero luego notó que le faltaba algo, porque no podía sostenerse bien.

Cuando encontró la silla de montaje, ni siquiera supo como colocarla. Con tantas hebillas y cuerdas, la acción resultaba imposible. Pero al final, de algún modo u otro, Clary pudo hacerse con ello.

Ahora daba igual, de todas formas, que lo hubiera hecho. Porque el maldito caballo no dejaba de moverse, nervioso. Y Clary así no podía montarse.

Estaba ya toda empapada de sudor por el calor que provocaba el sol, y el cabello corto, por primera vez, se le había esponjado en todas direcciones.

Con un resoplido de frustración, la muchacha le dio una patada a un guijarro.

—Estúpido caballo tonto. —escupió con enojo.

—Vaya, vaya. Cuánto enfado. ¿Se puede saber qué te ha hecho el pobre Isidoro ?

Aquella voz la tomó tan de sorpresa, que Clary, al darse la vuelta, tropezó con sus propios pies, y terminó dándose de bruces contra el suelo.

Tierra tragame. Tragame.

Alexander Lightwood no se rió de ella, pero parecía estar haciendo un esfuerzo sobrehumano por seguir sin hacerlo. Se inclinó sobre su amiga y le tendió una mano.

—Clarissa, ¿que estás haciendo aquí?

Clarissa aceptó de buena gana la mano suave que le ofrecían y se levantó de un tirón.

Sentía las piernas como gelatina, pero de todas maneras logró seguir en pie. Miró a Alec con las mejillas encendidas.

—Lo mismo te podría preguntar —decidió evadir su pregunta —. Isabelle me ha dicho que no llegaste a dormir. —sin ser capaz de reprimirse, le tocó un brazo — ¿Te sucedió algo?

TMI Fanfic- DIFERENCES.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora