Valgic.

Capítulo III: Ni una chispita.

Capítulo III:

-...y así fue como nuestro país puso fin a la cuarta guerra mundial.

Sonó el timbre. Fui la primera en salir de clase. Mientras la profesora explicaba no-se-qué de la cuarta guerra mundial, me surgió una nueva duda sobre el Reconocimiento.

Se supone que la hechicera de nuestro estado debía decir a todos los niños qué don tenían en la ceremonia del Reconocimiento, que se celebraba cada 31 de diciembre, cuando todos habíamos cumplido los diez años. Pero eso solo eran meros formalismos, ya que justo un mes y medio antes de su décimo cumpleaños, el niño ya habría aprendido a controlar alguno de los elementos. Y mi problema radicaba en que yo aún no controlaba nada.

Al llegar a la biblioteca me puse a buscar un libro que encontré hace unos meses: hablaba de todos los dones que podían tener los valgics, es decir, nosotros.

Que yo supiera, solo había un país más formado de valgics, la India. Era el país más próspero del mundo, seguido de Nueva América del Norte -conocida por su intolerancia hacia los mágicos y hacia cualquier cosa que no fuera considerada "normal"- y, a continuación, el nuestro, el Reino de Alaska.

Según el libro, los más comunes eran el control sobre alguno de los cuatro elementos, controlar la vegetación, luego la sanación, el extraño don de ver el aura de una persona (que era el que tenían los hechiceros)... y ya está. Nada más.

Me apoyé en una pared y me dejé caer hasta el suelo, con el libro sobre las piernas. Oh, Dios. ¿Y si yo resultaba ser una decepción enorme? Estaba segura de que algo en mis genes había fallado: yo no tenía ni una chispita de magia. Y mañana el país entero lo sabría. Hasta podía ver los titulares: "La princesa Luciana, segunda en la línea de sucesión a la Corona del Reino de Alaska, no tiene magia en sus venas." Creo que moriré de vergüenza.

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¡Holaa!

¿Cómo estáis? Espero que bien ^.^

Como os prometí, aquí os traigo el tercer capítulo de mi libro, segundo del día. Siento actualizar a estas horas, pero se me ha ido al santo al cielo mientras escuchaba música (concretamente El mundo, de Pablo López, os la recomiendo) y acabo de darme cuenta de la hora que es aquí (23:17).  Lo que me recuerda, ¿de dónde sois? Me iría bien saberlo para actualizar a unas horas decentes, aunque yo voy bastante perdida con eso de los horarios ahora que es verano... bueno, como sea, al menos lo voy a intentar por vosotros :)

Este sábado seguiré con el capítulo 4, como prometí. Así que hasta el sábado :), y gracias por leer mi historia, os amo :*

Debo insistir en eso de la estrellita, ya sabéis a qué me refiero ;).

Un besazo enorme y mil gracias,

Constança 💕.

P.D.: Me encantaría que os pasarais por la historia de mi amiga Ilenia (Ilenia_24 en Wattpad), que se llama ¿Por qué no?. Solo tiene un capítulo publicado, pero a mí me ha encantado el final y me he quedado con la intriga de saber qué pasaba con la ji... digoo nada, no spoilers 😇. Hasta el sábado :)