Vamos de regreso a casa, la verdad es que no quiero llegar, si llegamos, perdería a Kyle, lo despedirán y... No podría soportar la pérdida, no podría soportar no verlo cada día de mi vida. Lo necesito y haya lo que haya hecho no estoy dispuesta a dejarlo ir. Me volteo discretamente a su dirección para ver si ya al menos esta calmado y podemos hablar con mas tranquilidad. Su mandíbula esta tensada. Creo que esta aun enojado.
Decido romper el silencio que hemos creado los dos.
-Kyle, si le dices esto a mis padres te despedirán. No quiero...
No pude terminar la frase. El estaciono el auto y me miro directamente a los ojos.
-Sabes que de una u otra forma se van a enterar.
-Podemos...
Negó con la cabeza.
-No, en el contrato dice que no puedo ocultar algo que te haya pasado. Por insignificante que sea.
-Pero estoy perfectamente bien. No me...
-¡No! Ese... Tipo, te ha tocado.
Puse los ojos en blanco, es cierto, pero no me hizo nada malo o algo peor. Kyle arranco el auto nuevamente. Seguimos el camino hacia casa. No podía creer que le iba a decir a mis padres por su propia voluntad lo que había sucedido, no me molestaría que no le dijera a mis padres. Pero estaba decidido a hacerlo en cuanto llegáramos. Intente idear un plan para evitarlo a toca costa, pero no funcionaria de todas formas. Maldita sea. No quería que Kyle se fuera. No podría vivir mi vida sin verlo.
Cuando llegamos a casa aparco el auto, se bajo y abrió la puerta del copiloto. Acepte su mano para que me ayudara a bajar y caminamos directo a la entrada. Mis piernas temblaban. Me preguntaba si estarían en casa mis padres. En cuanto abrimos la puerta me quede estupefacta. ¿Donde estaban los muebles? ¿Qué pasó? Mire a Kyle para ver si el conocía la repuesta. Pero su mirada me dijo todo, no la conocía. Dios, habrán rodado mientras todos estábamos fuera de casa. En cuanto seguimos caminando nos dirigimos a la cocina. Habían cajas, me acerque a una y note que estaban llenas de las vajillas mas caras que teníamos. ¿Harán una remodelación o algo por el estilo? Kyle camino a su habitación. Las maletas estaban sobre la cama o mas bien sobre el colchón, abrió el armario y noto que no había nada. Absolutamente nada de sus pertenencias, preocupado reviso las maletas y con cara de alivio sonrío al notar que sus cosas yacían a salvo en las maletas. Me alegre también.
-¿Qué pasó?
-No tengo idea, después de que me dejaras en casa de Cameron, ¿habías vuelto a casa?
-No. Llamare a tus padres.
No sabia que estaba pasando. O es que...
Contestaron al tercer tono. Kyle puso el altavoz para que también escuchara yo.
-Kyle, hola, ¿qué sucede?
Es mamá.
-Señora, disculpe que la interrumpa, pero la casa, no hay ningún mueble en ella. No tengo idea de lo que paso.-Kyle, querido, no te preocupes. La mudanza no tardará en llegar para llevarse lo ultimo de la casa. Nos mudamos hoy mismo.
En cuanto dijo eso me quede boquiabierta. ¿Cómo que hoy? Por que no lo consultaron antes conmigo y con Kyle. Pero un poco mas conmigo. Odio cuando deciden las cosas por su lado y no me piden al menos mi opinión. Es algo que no me agradaba de ellos.
-Perdone, ¿hoy nos vamos?
-Como escuchaste. Nosotros estamos en el aeropuerto, ya están todos sus papeles, tanto los tuyos como los de mi niña. Y no te preocupes por tu madre, ya sabe que te vienes con nosotros a Boston.
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El Escolta (En Edición)
Romance"Una vez que te enamoras, no puedes salir fácilmente" Brooklyn, una chica que cursa el último año de preparatoria, sufre un incidente saliendo de su instituto. Cuando sus padres se enteran, toman la decisión de contratar a un chico que sea su escol...