Complaciendo a Papá. EN EDICIÓN.

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(Recomendable haber leído el capítulo 11 y 19)

Toqué el timbre de la casa de Collin y esperé. No tenía mucho que debía haber despertado, así que esperaba que abriera pronto.

Escuché unos ruidos y algo caerse, provenían de afuera, donde yo estaba. Cuando me volteé encontré a Collin medio inconsciente sosteniendo una cerveza. Me acerqué rápidamente a él y le ayude a sentarse en los escalones de la entrada.

Parecía ido, así que le dí una bofetada. Se cayó hacia atrás por el impacto y empezó a quejarse de dolor. Cuando se levantó me miró sonriente.

-Crack, linda que gusto.- su aliento olía mucho a alcohol y aunque estaba sentado no podia mantener el equilibrio.

-Collin, dame las llaves y entremos, debes darte un baño de agua helada.- metió sus manos a los bolsillos y me tendió las llaves. Me reí al ver un gatito azul como llavero.

*

Después de darse el baño, Collin había caído profundamente dormido. Ya habían dado las cuatro de la tarde y seguía roncando, llevaba casi diez horas dormido.

Al ser la única persona despierta en casa me aburrí y me puse a ver la televisión mientras comía helado que había agarrado del refri.

Estaba viendo Click cuando el timbre sonó.

Me limpié la boca con la mano y me paré a abrir la puerta, un chico con uniforme me miraba sonriente mientras sostenía dos cajas de pizza.

-¿Collin Bloom?- antes de que pudiera responder una mano se colocó en mi cintura.

-Si, ten, guarda el cambio- el chico recibió el dinero y le entregó las cajas a Collin.

Bueno, ya estaba despierto.

Cerré la puerta y dejé que Collin me guíara a la cocina mientras me agarraba de la cintura.

-Pensé que era un sueño eso de tenerte aquí con una maleta sobre tus hombros obligandome a meterme a la ducha.- dejó las cajas en la isleta y colocó su otra mano en mi cintura.

-Lamento decirte que no fue un sueño- me aleje de el y abrí una caja- Carnes frías, delicioso- tomé un pedazo y mordí primero el borde- Necesito un lugar para quedarme mientras busco algo estable en la ciudad y tu casa era perfecta.

Collin se sentó en un banco y bufo, después se le iluminó la cara- ¿Porque no te quedas aquí?

Le mire incrédula- Eso ya lo había decidido.

Se paró del banco y se acercó a mi- ¡Hey!- protesté cuando me arrebato mi pedazo de pizza y la tiro a la basura- Desperdicio de recursos.

-Me refiero a que te quedes a vivir conmigo-

*

-No, no, no, no queremos no, ser tan huecas como las divinas- Marie cantaba a todo pulmón mientras Wanda y yo la veíamos confusas pues no entendíamos lo que decía.- Es una canción de una seria mexicana, cuando fui a Yucatán con mis tíos la descubrí- asentimos sin mucho interés a la vez que ella seguía cantando.

Queen, Olive y Melody estaban del otro lado de la tienda, al parecer a las tres las habían invitado a una gala de cuarentones y querían ir presentables, Wanda, Marie y yo quisimos acompañarlas.

Después de mi charla corta con Collin y su propuesta de vivir con el, había decidido salir un rato para sopesar pros y contras.

Por ahora solo tenía unos cuantos:

Uno, Collin hacia fiestas de vez en cuando y terminaban muy tarde. El pro sería asistir a todas las que planee y el contra tener que ayudarle a limpiar y por ello dormir tarde.

Dos, al ser sacado del equipo de soccer, Collin siempre estaba en su casa así que no podría tener mis ratos a solas merodeando por ahí.

Tres, Collin tenía una casa grande, al ser hijo de empresarios sus padres le daban lo mejor, el pro era tener una de las habitaciones grandes y el contra perderme en la casa.

Cuatro, solo un pro en lo que va de patio trasero, tiene piscina.

Cinco, Collin es universitario y tiene necesidades de contacto físico, el contra de esto es tener que soportar cuando lleve una chica o mas, a casa. El pro es que yo podría hacer lo mismo que el.

Y seis, la universidad de Collin queda cerca de su casa, al igual que la escuela. El pro de esto es que Collin podría llevarme en su auto climatizado todos los días (o cuando no tenga resaca) y el contra sería que no podría mentirle a la hora de llegar tarde a casa.

Aunque no lo crean, el señorito Bloom me pusó horario si acepto. No puedo llegar después de las ocho.

Sentí que alguien se acercaba a mí y volteé, Marie estaba tomando el asiento a mi lado y suspiró.

-Ya descubrí lo de la lista- Wanda y yo la miramos expectantes- Al parecer trata de chicas que cayeron en una apuesta.

-Explícate- pidió Wanda, yo le seguí.

-Ve al punto-.

-Es lo típico, sobre que chico se folla a mas chicas, Kat esta en la parte de Casi completo.- enarqué una ceja y ella continuó- Kat casi cae.

-¿Quienes hicieron la lista?- preguntó Wanda y yo me pegué a Marie con curiosidad.

-Willmer, Oliver, Mattson, Winifred, Osvald y Peter- mi corazón dio un brinco al escuchar el nombre de Will.

-¿Estas segura que Willmer esta en eso?- dentro de mi deseaba que dijera que no.

-En la hilera de su nombre hay otros cuatro, dos chicas de primero, una de segundo y otra de ultimo.- soltó.

-¿Quien es la de ultimo?- crucé los dedos y aparte la imagen de la chica que tenía en mente.

Y antes de que pudiera decir quien era, lo supe. Era mas que obvio.

Mi corazón se paro por un instante y las lágrimas amenazaron con salir.

-Bethany- pronunció con lastima y asco mi amiga.