Complaciendo a Papá. EN EDICIÓN.

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Jhon

-No contesta- fue lo único que dijo Will. Esta era la quinta vez que llamábamos a su celular y nos dejaba en grabación.

-Dame eso- mi pequeña, Fanny, le arrebató él teléfono a Will y empezó a marcar. Se llevo él teléfono al oído y salió de la estancia.- ¿Hola?- la ví pasearse por la cocina mientras sonreía.- Eso es fantástico hermana, estoy segura de que durará la relación. Si. Que tierno. No, él no sería así. Ajá, comprendo. Esta bien.- me miró de reojo con una mirada extraña. Me quedé sorprendido, él brillo en sus ojos ya no estaba, igual que con Carter- Por cierto, dice Jhon que vengas a casa, él abuelo y él tío Jacob están aquí y quieren verte. Además él y Bob anunciarán algo importante.- mi corazón se detuvo al escuchar eso. Jhon. No había dicho papá.- No, no tengo idea de que es. No creo que haya algún problema, ven con él. Mamá se pondrá feliz. Si, t-te quiero. ¿Qué? Nada. Adiós.- colgó con rubor en sus mejillas y se acercó a mi rápidamente.- Va a venir y nos presentará a alguien.

Un rayo se escuchó y Fanny y los trillizos saltaron del susto. Matt, Maxwell y Marvin fueron corriendo con Marilyn y se le subieron encima. Yo miré a mi pequeña.

-Ven, Fanny- abrí mis brazos para que se sentara conmigo y se abrazara a mi por los rayos. Ella me miro despectivamente y se metió a la cocina con Elizabeth. Alice vino a sentarse junto a mi y empezó a acariciarme la espalda.

¿Qué pasaba con Fanny?

Un recuerdo de hace doce años invadió mi mente. Alice, más joven que ahora, tendía la ropa junto a Carter, que tenía cinco años, y yo estaba en la parte de atrás observándolas mientras jugaba con Fanny, que contaba con dos años. Cada que Alice se movía, Carter iba trás ella con una nueva prenda limpia en las manos. Dejando los sentimientos pasados de lado, ahora esa escena me resultaba muy adorable. Un sentimiento de angustia me invadió cuando Carter tiró accidentalmente una prenda. Ya sabia que venía después.

Me ví a mi mismo parándome bruscamente de la silla en la que estaba y acomodando a Fanny en mis brazos. Me revolví incómodo cuando recordé esas palabras. Las que siempre le decía o gritaba a Carter, sin importar su edad.

"Esto no habría si fueras varón"

La imagen de mi mismo dándole una bofetada a mi pequeña de cinco años, frágil y escuálida por mi capricho de no desperdiciar comida en ella, me hizo estremecer.

-¿Estas bien, querido?- miré a mi esposa sonriente. Will corrió a la puerta y Fanny le siguió.

-Carter llegó- avisó Will y con una mirada de asco, agregó.- Y viene con Collin.