El Cajero de Doots | N.H ♡

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Iveth.

—Santa Mierda —exclamé sin querer en un tono más elevado de lo que quería, haciendo que los dos chicos se dieran la vuelta para mirarme.

Rápidamente pasé de largo a agarrar un canasto para poner mis mercaderías.

¡Joder! Ese hombre era perfecto. Ok Iveth, estas exagerando, es sólo un hombre más... más guapo, más hermosa sonrisa, más... ¡Concéntrate!

Estaba tan distraidamente cargando el azúcar en una bolsa que no me di cuenta de que esta estaba rota, cosa que hizo que todo se derramara.

—¡Mierda! —Volví a exclamar, logrando que una señora me diera un buen sermón acerca "No decir malas palabras frente a los niños" ni que fuera mi mamá la loca esta.

Al notar que ya tenía todo lo necesario al menos para sobrevivir este día, me dispuse a ir hacia las cajas.

Noté que algunas estaban vacías, pero yo me fuí hacia la de mi hombre. ¡Iveth tranquilizate! Ni siquiera sabes su nombre.

Me posé frente a la caja pero por lo visto el espécimen de macho perfecto no lo notaba.

Niall.

Seguíamos hablando con Louis, hasta que el interrumpió un divertido anécdota que estaba contandole.

—Emmm... Niall —dijo apuntando con su dedo detrás mío.

Me di vuelta y noté que era una clienta, la chica que hace unos minutos exclamó algo fuerte sus pensamientos.

—Buenos días, ¿Factura?

-Yani.