El Cajero de Doots | N.H ♡

Extra 10 {Final}

18 meses después...

Hace poco más de un año que Iveth y Niall ya se casaron, cuando eso, Iveth Iveth tenía 35 semanas de embarazo, estaban a nada de convertirse en padres, y hoy en día, ellos estan felices, a cinco días que su niña cumpla su primer año de vida.

La pequeña Tina estaba aprendiendo con sus papás a dar sus primeros pasos, ellos ya estaban algo cansados, pero a la vez contentos de que su hija estaba aprendiendo algo nuevo en su vida y ellos formaban parte de eso.

Iveth dejó a Niall un momento con la bebé mientras iba a revisar que la cena no se queme. A los minutos sintió unas manos en su cintura y otras en sus piernas, las personas que más amaba en el mundo estaban agarrandola fuertemente.

—¿Qué pasa, cariño? —dijo Iveth, agachandose para alzar a Tina.

—Nada.

—Le hablaba a la bebé, Niall.

—Ya lo sabía, sólo quería responder por ella.

Iveth levantó una ceja, Niall nunca será un buen mentiroso.

—Amor ¿Puedes arreglar la mesa, por favor?

—Claro.

Iveth llevó a Tina en su asiento exclusivo para bebés y fue a traer la cena.

Niall, como siempre, estaba halagando a Iveth por la deliciosa cena que hizo.

Luego de que Iveth le dió todo la comida a la niña, fue a acostarla en su cuna, para luego volver en la cocina con Niall.

—¿Ya terminaste?

—Espera a que me seque las manos, Niall, luego iremos a dormir.

—Pero yo no quiero dormir.

—Entonces ¿Qué quieres hacer?

—¿Qué tal sí le hacemos un hermanito a Tina? —dijo Niall, guiñándole un ojo a Iveth, mientras le apretaba el vientre.

—Imposible —Le respondió, quitando su mano.

—¿Por qué? Eres la mejor mamá del mundo, no creo que tengas problemas, considerando que te encanta que tengamos algunas de esas sesiones —Niall levantó una ceja hacia Iveth, ella empezó a sonrojarse.

—No digas eso.

—¿Pero por qué no quieres que Tina tenga un hermanito?

—Porque ya está creciendo uno dentro de mí.

Los ojos de Niall se iluminaron tanto como la primera vez que Iveth le dijo que estaba embarazada de Tina.

—¿Es- es en serio?

—Si, cariño, tendremos otro bebé.

Niall abrazó a Iveth con todas sus fuerzas, ella siempre tenía las mejores sorpresas para el.

—Te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo mucho, mi amor —dijo Niall, repartiendo besos por toda la cara y vientre de Iveth.

—Yo también te amo.

—Eres la mejor, no puedo creerlo ¡Nuestro segundo bebé! ¿Hace cuánto lo sabes?

—El día de nuestro aniversario lo confirme, me hice una prueba antes, pero no tenía tanta confianza, entonces fui a la clínica y ahí me enteré.

—¿Por qué no me lo dijiste ese día?

—Porque quería decírtelo en otro momento, no puedo decirte en cada aniversario que tengamos que estoy embarazada.

—Pero igual es la mejor noticia del mundo, Tina estará feliz de tener un hermanito.

—¿Cómo estas tan seguro?

—Yo lo sé.

—Dijiste que Tina sería un varón.

—Si, pero... yo tenía en mi mente que sería una niña.

—Si, seguro.

—¿Cuánto tiempo tienes? —Le preguntó Niall, apretando a Iveth contra la pared.

—Casi un mes.

—¿Entonces todavía es seguro que podamos tener un momento a solas?

—No veo porque no.

Dicho eso, Niall se abalanzó hacia Iveth, besandola salvajemente, mientras Iveth envolvía sus piernas por la cintura de Niall.

—A pesar de estar embarazada, siempre serás toda una gatita.

Aunque Iveth ya compartió todos los momentos posibles con Niall, seguía sonrojandose cuando el mencionaba ese tema.

Fueron directo a su habitación, deshaciendose de sus ropas en el camino, para poder comenzar rápidamente cuando lleguen.

Niall, a pesar de todo, seguía tratando con cuidado a su chica, para no lastimarla ni incomodar al bebé, aunque todavía no tenga ni un mes.

Iveth por su lado, olvidó completamente que estaba embarazada, mientras se ponía encima de Niall, sintiendo como el y su amigo se estaban divirtiendo.

Y así es como esta hermosa pareja pasa su vida, con una hermosa bebé y otro en camino, viviendo todos juntos en una casa perfecta para ellos tres, que esperaba la venida de otras futuras personas, más felices que nunca, sólo por el hecho de que cada uno tenía a las personas que más amaban en el mundo a su lado.

- Yani.