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Niall.

He decidido que si, Iveth realmente me atrae más que nadie. Me tomó 3 meses más poder asegurar mis sentimientos por ella. Por lo que hoy, en la tarde, cuando la llevé a su casa luego de estar en el supermercado le propuse la salida de este sábado.

Así es, todos los sábados salimos a un lugar, y esta semana era mi turno de escoger, y he decidido que este será un día diferente para los dos.

Iveth.

Hoy ya es sábado y estoy nerviosa, no se la razón realmente, el primer semestre de la universidad ya pasó y no tengo que preocuparme por los exámenes en estos momentos, pero hoy desperté un poco diferente, seguro es por el calor.

Niall me dijo que vendría a las doce del medio día hoy, ya que hoy comenzaron sus vacaciones en el trabajo, por lo que propuso que tengamos un día de picnic.

En una hora el llegará a casa y estaba preparando algunas cosas para llevar. Cuando terminé fui a darme una ducha porque hacia mucho calor, decidí ponerme un vestido y unas sandalias y para terminar me hice una coleta bien alta.

  —Lista —dije para mí misma. Y a los segundos ya escuché que tocaban el timbre. Menos mal que terminé rápido con esto.

Fui corriendo a abrir la puerta, no quería hacer esperar a Niall.

—Hola, preciosa —Genial, recién nos vemos y ya me estoy sonrojando.

—Hola Niall.

—Y no me equivoco al decirte preciosa, te ves hermosa.

—Gracias, tu también luces genial.

—¿Lista?

—Si, traeré la canasta.

—¿Canasta?

—Es un picnic, Niall. ¿Acaso nunca viste películas o series?

—De acuerdo, no te enojes.

—No me enojé, idiota, sólo te digo —Me subo al auto una vez que Niall abre la puerta para mi, el siempre será caballeroso.

—¿A donde vamos?

—A un picnic.

—Ya sé, pero donde.

—En un lugar... No me mires así, Iveth, es cierto. Sólo espera a que lleguemos.

—Está bien. 

Luego de 30 minutos de camino al fin llegamos a nuestro destino. Juro que hasta creí que iríamos a un campo en el otro lado de la ciudad, pero no, Niall me trajo a una laguna con una pequeña cascada.

—Guau—digo mientras bajo la canasta en el verde pasto.

—¿Te gusta?

—Es hermoso.

— Que bien, no sabía a donde ir y aprovechando el calor, pensé en este lugar, con mis papás solíamos venir mucho cuando era más chico. Siempre fue un lugar solitario, no entiendo porque, no esta muy oculto y es muy fresca la brisa.

—Es cierto.

—Iveth... —dice Niall acercándose a mi.

—¿Si?

—¿Te pusiste pestañas postizas? —Khé.

— Claro que no.

—No te creo, a ver, cierra tus ojos, lo comprobare por cuenta propia.

¿Y a este que le pasa? Suelto un suspiro antes de cerrarlos.

Y pocos segundos después, lo que menos me imaginé que pasaría, estaba pasando.

Niall me estaba besando...

- Yani.

El Cajero de Doots | N.H ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora