La verdad sobre mi vida [ZeLu]

| 5 | Entrenamiento con Acnología y transformación inesperada

Narra Lucy

—Lucy, te presento a Acnología —me dijo Zeref sonriente.

—Ya le conozco —contesté secamente.

—¿Tú no eres una de las de la isla Tenrou?

—Así es.

"¡Volvamos a ser equipo de nuevo, Lucy!"

"¡No me voy a rendir tan fácilmente!"

Los recuerdos de la isla Tenrou con Natsu, debo borrarlos de mi mente...

—Quiero que la entrenes, Acnología.

—Yo no entreno a cualquiera —dijo el dragón desafiante.

—¿Y cómo probamos mi fuerza? —pregunté en el mismo tono.

Acnología no me respondió, simplemente hizo una señal con la cabeza a Zeref, y éste de repente hizo aparecer un cubo gigante.

—Si eres capaz de destruirlo —dice Zeref señalando el cubo—, Acnología estará dispuesto a entrenarte. ¡Buena suerte!

Yo solo le di una leve sonrisa, y empecé a concentrarme para hacer Urano Metria, el cual había perfeccionado mucho a lo largo de este mes.

Me posicioné delante del cubo y cerré lentamente los ojos.

Encuesta los cielos, y ábrelos...
Entre todas las estrellas de los cielos,
Hazte conocer a mí
Oh, Tetrabiblos...
Yo soy quien tiene el dominio de las estrellas...
Publica tu aspecto, una puerta malévola
O ochenta y ocho signos...
Brillen!
URANO METRIA!

El ataque iba directamente hacia el cubo, y cuando impactó, se produjo una gran explosión que nubló mi vista durante unos instantes.

Cuando volví a ver bien, vi que el cubo no estaba, y me dieron ganas de bailar de alegría, pero me contuve para no hacer el ridículo.

—Ya está.

—¡Muy bien Lucy! —Zeref corrió hacia mí y me abrazó.

—Os olvidáis de mí —comentó un chico cruzado de brazos.

—¿Quién eres? —pregunté confusa separándome de Zeref.

—¿Quién voy a ser? Pues Acnología, preciosa —me contestó él en tono seductor.

Sin querer me sonrojé mucho, es muy guapo. ¿De verdad que es Acnología? Frente a mi hay un chico joven de más o menos mi edad, de pelo negro de punta y con las puntas del cabello azules (del color de las alas de Acnología), y sus ojos azules oscuro.

—No sabía que te podías convertir en humano.

—Pues ya lo sabes preciosa. —Hizo una breve pausa—. Oye, ¡¿cómo se te ocurre decirme viejo?! —protestó dirigiéndose a Zeref.

—Eres un viejo a pesar de tu apariencia.

—Mira quién habla.

—¡Dejad de pelear por favor!

Pensé que me saldría un tono molesto, pero al rato me di cuenta de que estaba cargado de tristeza aquel comentario, ya que pelean como...Dragneel y Gray.

Zeref parece que comprendió el mensaje.

—De acuerdo, volvamos a la cabaña.

Me pregunto...¿Zeref sentirá lástima por mi? No me extrañaría nada.