Amores Destructivos |2° temp. Amores Peligrosos|

Capítulo 23

-Fernanda – su voz sonaba decepcionada. No me atreví a mirarla a los ojos - ¿Cómo?-.

-¿No sabes cómo se hacen los bebés? – preguntó Karla tratando de relajar el ambiente.

Mónica y yo volteamos a ver a Karla.

-Lo siento – se disculpó Karla y guardó silencio.

-¿De quién es el bebé? – preguntó Mónica.

-Creo que es obvio-.

-¿De Freddy?-.

Asentí.

-Yo también seré tía – Karla sonrió.

Mi hermana se mantuvo sería, pero finalmente sonrió.

-Fernanda ¿sabes lo que es un condón?-.

Sonreí.

-Lo siento-.

-Ya no hay nada que hacer, más que cuidarte y cuidar al bebé. ¿Qué te dijo la Doctora?-.

-Frijolito está bien...-.

-¿Frijolito?-.

-Así le diré mientras le encuentro un lindo nombre. – Mi hermana sonrió e hizo un gesto para que continuara. – Tengo un mes de embarazo y me dio mucho ácido fólico-.

-¿Cuándo pensabas decirnos?-.

-Pronto, mi plan era hacerlo esta semana-.

-Bien, pues a más tardar el viernes le tendrás que decir a Jorge si no, yo misma le diré-.

Asentí.

-¿Y Freddy sabe?-.

-No – negué – y no sé si le quiero decir, de hecho, no quiero decirle-.

-Jorge querrá...-.

-Sé lo que Jorge querrá, pero no es cosa de Jorge, es mía. Y no quiero que Freddy se enteré-.

-Ya hablaremos de eso después. ¿Qué pasa con Josh?-.

-Terminaré con él, en cuanto encuentre la forma de decirle del bebé-.

-Ay, hermana. Te metes en muchos problemas – negó. – Dejemos el asunto por ahora, te iré a preparar algo nutritivo de comer, olvídate de toda la chatarra, mi sobrino va a nacer sano-.

Mi hermana salió del cuarto, dejándonos a Karla y a mí solas.

-Eso salió mejor de lo que esperaba – dijo Karla.

-Eso es porque ella es Mónica, espera a ver cómo reacciona Jorge-.

Karla y yo pusimos un poco de música y ordenamos la habitación que los últimos días estaba hecha un desastre.

-¿Qué hay en esta caja? – preguntó Karla.

Era una cajita de madera que estaba en el suelo del closet. La tome y la abrí, en ella había varios papeles de notitas que me había pasado con Freddy u otras amigas cuando estaba en preparatoria, al igual había fotos de mi último año de preuniversitaria, pero había algo que me llamó la atención más que otra cosa, un pequeño objeto que había olvidado que lo había guardado ahí. El collar que Freddy me había regalado cuando cumplí 18 años, el collar con el dije de "F" en oro blanco. Lo había guardado desde una vez que casi lo perdía por distraída.

Lo tomé en mis manos y guarde la caja. Apreté fuerte el dije contra la palma de mi mano y luego lo deje en mi bolsa.

Sentí que todos los momentos, los buenos momentos, que había vivido con Freddy y todos los sentimientos que tenía, y aún conservaba, regresaban a mí tan rápido que resultaba muy abrumador.