Amores Destructivos |2° temp. Amores Peligrosos|

Capítulo 28

Mis ojos se fueron abriendo lentamente, me sentía mareada y desorientada, me dolía horrible la nariz. Recordaba perfectamente lo que había pasado y antes de volverme loca decidí pensar, todo estaba mal, tenía que encontrar una forma de salir bien, y ya no era precisamente por mí, Frijolito era mi principal motivación.

Mil ideas locas vinieron a mi mente, pero ninguna de ellas servía. Además, no me podía concentrar, entendía porque estaba ahí, postrada en una cama con las manos amarradas a la cabecera, y ahora sabía quién estaba detrás de todas las cosas malas que me habían pasado, no era estúpida, sabía sumar 2 más 2, sabía que todas las peleas con Freddy y nuestra separación era por culpa de ellos.

"Espero que estés disfrutando de tu felicidad... no durará mucho más".

Esa nota era cosa de ellos. Estaba tan sorprendida, de él nunca me lo hubiese imaginado y de ella... pff' de ella ni hablemos.

La puerta se abrió y él apareció.

-¿Te gusta tú cuarto? - preguntó sonriendo sínicamente.

-¿En dónde estoy?-.

-En un cuarto de hotel ¿no es obvio?-.

Por supuesto que era obvio, todo pintaba a ser un hotel barato.

-¿Me puedes explicar por qué estoy aquí? Entiendo la mitad de la historia-.

-Espera a que llegue mi dulce acompañante y después te explicaremos todo-.

No tuve que esperar mucho tiempo porque ella entró como si la hubiese llamado, entró y cerró rápidamente la puerta.

-Oh, ya despertó-.

-¡¿Me pueden explicar qué diablos estoy haciendo aquí?!-.

-¡No me grites estúpida! - me gritó ella de vuelta.

-Cálmate - le dijo él divertido - mejor hay que ármale la historia completa-.

-Lo que quieras, Diego-.

Sí, Diego había participado en mi secuestro y yo no sabía por qué.

-¿Recuerdas a Nick? - preguntó Diego.

-Claro que lo recuerda - dijo ella molesta.

Ella tenía razón ¿cómo lo iba a olvidar? Era imposible.

-Bueno, Nick era mi hermano-.

-Y mi novio - interrumpió ella. - ¡Él y yo tuvimos muchos planes! Pero gracias a ti y al estúpido de Freddy no se pudieron hacer realidad...-.

-Samantha, cálmate - le pidió Diego una vez más.

Sí, fue Samantha todo este tiempo, nunca fue Lía, al menos no por ella misma. Samantha y Diego nos querían separa a Freddy y a mí, y al parecer lo habían logrado.

-¡No! - Gritó - ya fue bastante el tiempo - se giró a verme. - No tienes idea cuanto te odio. Odiaba despertar y tener que verte, y si hubiese sido por mí a la primera oportunidad me hubiera deshecho de ti-.

-Sam...-.

No pude seguir hablando pues ella me dio una fuerte cachetada y enseguida se abalanzó sobre mí, lo cual era totalmente injusto pues yo, con mis manos amarradas a la cama, lo único que podía hacer era retorcerme debajo de ella esperando a que me soltará. Finalmente fue Diego quien la quitó, por supuesto no sin antes de que Samantha me dejara golpes y rasguños por buena parte de mi cara. Una vez más no me preocupaba por mí, me preocupaba Frijolito.

-¿Entiendes que haces aquí? - preguntó Diego.

-Venganza - dije obvia.

-Exacto - habló Samantha un poco más calmada.