Capítulo 11

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Después de evitar ser asesinado por unos rayos -que nadie supo de donde salieron- baje del segundo piso junto a Mirajane, me acerque a la barra donde estaba mi gran amiga Cana.

- Ya volví mi vida - le dije acercándome a ella.

- Hoooooooolololaaaaaaaa Sorato, ¿como te fue con Mira allá arriba? ¿Eh? - subía y bajaba sus cejas.

- Bien, hablamos mucho y ¡no mal pienses Cana! Sólo hablamos de nuestros sentimientos.

- ¿Sentimientos? ¡¿Te le declaraste?! - en ese momento ella no parecía ebria, parecía una chica enfadada.

- Claro que no Cana, a mi me gusta otra persona ¿vale? - le sonreí y la abrace. Puse mi mano en su cintura.

- ¿Quien te gusta entonces? - dijo mirando a otro lado.

- Por el momento no lo vas a saber querida, aún no es el momento - le sonreí y le di un beso en la mejilla.

- ¡Sorato! - trató de golpearme cuando ya me estaba alejando de ella rumbo al baño.

Después de hacer eso con Cana, me acerque a los baños para realizar mis cosas biológicas. Abrí la puerta del baño y mire para ver quien estaba.

" Uno nunca sabe si hay algún Ninja con misión de acabar con uno, nunca se sabe "

Pero lo único que encontré es la absoluta nada. Nada de nada. Ni una mosca estaba volando por ahí. Nada de nada.

Me acerque a donde uno hace sus necesidades, yo iba a orinar. Siempre tardó un par de segundos en empezar a mear después de haber preparado todo el equipo, así que esperé un segundo y luego empecé a mear. Acababa de llegar a la fase en la que te estremeses de alivio cuando alguien entra golpeando la puerta al baño.

- ¡Lo mato! Te juro que lo mato Salamander, yo lo mato - ese es Gajeel amenazando a alguien.

Me asuste que quería detener la meada, pero no podía, claro. Mear es como un buen libro: cuando empiezas es muy muy difícil parar.

- Tranquilo Gajeel, que yo lo congelaré y no molestara más - Gray dijo con un tono que me dio miedo.

- Si como no exhibicionista, el maneja los estados del agua. Fácilmente podría deshacer tu hielo. - Dijo Natsu hablando seriamente.

- Casi lo mató... - dijo Gray haciendo sonar sus dedos.

- Debemos sacarlo de aquí, se esta acercando demasiado a las chicas - dijo para mi sorpresa Laxus enojado.

- ¡Lo sabemos! - dijeron los demás a modo de protesta.

- Pero no sabemos el cómo, ya que las chicas se volvieron muy amigas de ese sujeto lleno de rulos, horribles por cierto - dijo Gajeel haciéndome enojar.

Sacudí las últimas gotas, me subí la cremallera y me acerque a la puerta.
Estaba por abrirla cuando escuche algo que me sorprendió.

- Aunque no se porque le odiamos, si nosotros no somos capaces de decir lo que sentimos hacia las chicas... - dijo Gray - así que no se porque nos molestamos tanto.

- Tiene razón el cabeza de hielo, no podemos decir lo que sentimos y estamos exigiendo algo que no nos corresponde - dijo Natsu.

Mi enojo se controló, y preste más atención a lo que ellos decían. Fue a tal nivel mi curiosidad que me senté a escuchar.

- Ya, lo se y creó que todos sabemos eso - habló Gajeel - pero es igual. No puedo controlar mis celos al ver a la enana tan cerca de él, llamándolo Sorato-kun. Me hierve la sangre - golpeó la pared.

El cupido de Fairy TailDonde viven las historias. Descúbrelo ahora