Capitulo 12

4.7K 513 336
                                    

Ninguno duerme más esa mañana.

Rubén no deja de sentirse angustiado por algo que no hizo, pero que le ocasionó tremendo problema. Paola se mantiene con él, consolándolo lo más que puede. Bruno sólo observa y escucha, no sabe qué acotar para mejorar aunque sea un poco la situación.

Las lágrimas no dejan de escabullirse por los ojos del castaño, aunque él intente retenerlas. Se le hace imposible pensar de manera positiva para poder estar mejor recordando todo lo que ocurrió hace unas horas. Aún no se cree que Catalina haya hecho eso; actuado de esa forma sólo por celos. Pero tampoco puede creerse que Mangel le haya creído por completo sin siquiera haber escuchado a Rubén.

Aunque Mangel tampoco lo tiene demasiado fácil. Porque, a pesar de que todo indica a que le crea a Catalina, está un poco seguro de que Rubén no la golpearía, por más que la odie. Pero no sabe cuánto pudo haber cambiado Rubén en el transcurso de un año y medio. Quizás lo suficiente como para golpear a ella, sea cual sea la razón. Además no tiene nada con lo que apoyar la creencia a Rubén, en cambio hacia Catalina está el hecho de que la tenían agarrada de la muñeca, estaba protegiéndose el rostro y gritando por ayuda. No dejará de lado a su novia sólo por algo pasajero como Rubén.

Luego de unos minutos más llorando, Rubén por fin logra quedarse dormido. Pero su siesta no logra ser muy extensa, pues se despierta gracias a unos susurros cercanos. Abre los ojos lentamente y con cuidado para no ser descubierto. Paola y Bruno se encuentran a unos escasos centímetros del sofá y él, al parecer discutiendo en susurros que Rubén no logra comprender. Al pasar unos segundos Paola se da cuenta de que Rubén está despierto, por lo que hace unos gestos a Bruno para que se calle. Cuando este lo hace, ambos permanecen mirando a Rubén en completo silencio.

- ¿Qué ocurre? – Pregunta. Paola mira a Bruno como diciendo que se mantenga callado, este le devuelve la mirada de manera desafiante y abre la boca.

- Paola quiere ir a hablar con Mangel para arreglar todo este lío – Informa. Paola vuelve a mirarlo, molesta. Pero luego se voltea hacia Rubén.

- Sólo quiero que comprenda lo que realmente sucedió – El castaño se sienta y se frota sus ojos, cansado. Pero eso no le es un impedimento para que se levante y suspire.

- Yo también quiero que comprenda – Responde, en apoyo a Paola. Bruno bufa frustrado.

- ¿Y si no funciona? Seguirá molesto contigo, y tú estarás peor por aquello –

- De alguna manera le haremos comprender – Insiste Paola.

- Quiero contarle lo que realmente ocurrió, ¿si? No es mi prioridad que las cosas salgan bien, pues sé que no será así – Responde mientras se desordena el cabello con los dedos. Bruno suspira.

- Vale, vayamos – Acepta. Rubén esboza una pequeña y débil sonrisa, mientras camina hacia la puerta, con los nervios desde ya comiéndole los sesos.

Los tres muchachos salen del departamento, igual de desordenados que hace unas horas. Como a Rubén le ganan los nervios, Paola es la que toca la puerta del departamento de Mangel.

Aguardan los segundos necesarios, aunque Rubén siente que se desmayará en cualquier momento.

- ¿Si? – Pregunta Mangel cuando asoma por la puerta, claramente molesto. Paola retrocede permitiendo que Rubén ocupe su lugar, mientras tose nervioso.

- Quiero explicarte lo que real...

- No – Interrumpe Mangel antes de que Rubén terminara la frase, seguido de un gran portazo frente a su cara. Paola abre la boca, indignada, pero se guarda todo lo que tenía que decir para tocar aún más eufórica la puerta. Ésta vuelve a abrirse, dando paso a un Mangel muchísimo más cabreado-. Largo.

Broke (Rubelangel) 2da Temp.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora