capitulo 33

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    Vete.

-¿Te besó en medio de la calle? –me preguntó Logan, con la boca totalmente abierta en forma de O.
-¡Sí! –sonreí-. Creo... que esto ya no será secreto en poco tiempo ¿No crees?
-Quizás no, pero con la novia que tiene dudo que lo deje algún día.
-No quiero imaginarme cuando él se entere que lo están usando... -torcí la boca.
-¿No tienes pensado decírselo? –negué.
-Eso es porque estoy tomando tu consejo, solo espero el momento correcto... pero igual, se enfadará conmigo por no habérselo dicho y saberlo –bajé la mirada y la levanté en menos de cinco segundos para encontrarme con esos ojos azules bonitos que mi mejor amigo tenía-. ¿Y tú? ¿Cómo vas con Matt? –le pregunté, mientras ambos debamos un mordisco a la pizza de peperoni que habíamos pedido en su casa. Me sentía algo... extraña. Nunca había venido a casa de Logan.
-Creo que... bien, no lo sé... Este día ha estado un poco cortante conmigo y tengo miedo de que influya en nuestra broma que le hicimos a James el día de ayer.
-No lo creo... ustedes saben que se quieren mutuamente, pero son tan difíciles que no lo aceptan –palmeé su hombro-. Tranquilo, solo es cuestión de que pase un poco el tiempo y estoy segura que comenzarán a salir.
-Eso es lo que más anhelo, pero... mi mamá, no creo que acepte ¿Entiendes?
-Sí, lo entiendo. Pero ¿Acaso estar con Matt no te haría muy feliz? –Asintió-. Creo que tienes que hablar con ella y expresar lo que sientes.
-Como si fuera tan sencillo... -susurró-. Nada en casa es sencillo para mí.
-¿Qué tal si le dices tú a Matt ahora mismo? –Dejé mi pedazo de pizza a un lado de la mesita de noche-. ¡Anda! -No lo sé...
-¡¿Qué no sabes?! –Tomé mi cabello con desesperación-. ¡Ambos se quieren! ¿No?
-Sí, pero...
-Oh no, pero nada. ¿Tienes su teléfono? –Asintió-. Llámalo ahora mismo y cítalo en algún lugar para verlo.
-¿Y si no quiere?
-¡¿Cómo no va a querer con la clase de hombre que lo invita?! ¡Eres tan jodidamente guapo! –el rio bajito-. Tú puedes, Logan... no estás solo –lo abracé por los hombros.
-Bien... Ya vuelvo.

(...)

-¿Y bien? –le pregunté al instante que salió Logan de su habitación. Parecía como si la respuesta de Matt había sido verdaderamente mala-. ¿Qué ha pasado?
Me miró, totalmente serio-. ¡Ha dicho que sí! –sonrió, tomándome de mis manos para brincar sin parar-. ¡Saldré con él saldré con él!
-¡Wohooooo! ¡Se quieren y no son novios! ¡Se quieren y no son novios! –reí-. ¡¿Qué te pondrás?!
-No tengo idea... -torcí la boca.
-Ven, tenemos que arreglarte. Ve a ducharte, yo escogeré tu ropa ¿Bien? –Asintió.

Estaba en el closet de Logan, buscando entre su ropa para hacerlo lucir aún más guapo. Nunca en mi vida había hecho esto por un amigo. Escogí una Camisa azul, pantalones negros ajustados y converse acompañado con una gorra. Mi celular comenzó a vibrar en mi bolsillo, haciendo que observara quien era en la pantallita.

"Gruñón te está llamando" –sonreí.

-¿Hola?
-Niña, ¿Dónde estás? Estoy afuera de tu casa como un imbécil, ábreme la jodida puerta ¿Quieres? –maldición.
-Yo ah... no estoy en casa.
Se escuchó un suspiro del otro lado de la línea-. ¿Dónde estás? –me preguntó ya un tanto más enfadado.
-En casa de... Logan.
-Sí... lo sabía ¿Dónde más podrías estar? Cuando termines de besarlo y hacerle lo que quieras, me hablas. Mientras no ¿Entendido?
-No estoy haciendo nada de eso...
-Cuando termines me hablas ¿Entendiste si o no?
-Bien... -suspiré-. ¿Estás molesto?
-No, adiós.
-No espera...

Colgó. Dejándome con la palabra en la boca. Me senté en la cama de Logan a esperar a que terminara de salir de la ducha. Salió del baño, con una toalla amarrada en su cintura y una gran sonrisa.

-¿Tarde mucho?
-No... -suspiré-. Ahí está la ropa que te he escogido –sonrió-. ¿Te gusta?
-Sí... gracias –se sentó a mi lado-. Te veo decaída, hace rato no estabas así, ¿Se puede saber qué te pasa?
-No es nada...
-Dime la verdad.
-Creo que he discutido con James –levanté mi rostro hacia arriba, mientras que Logan negaba con su cabeza.
-¿Y ahora que te dijo ese loco?
-Estaba en casa, esperando a que le abriera y le tuve que decir que estaba contigo. Es decir... no tenía por qué decirle mentiras, y ya lo sabes... se enfadó.
-¿Qué te ha dicho?
- "Sí... lo sabía ¿Dónde más podrías estar? Cuando termines de besarlo y hacerle lo que quieras, me hablas. Mientras no ¿Entendido?" –lo arremedé, sin ganas.
-¿Acaso siempre será así? Ni quien lo aguante, pero ¿Lo pusiste en su lugar, cierto?
-...
-¿Cierto?
-...
-¡Annie!
-¡No pude!
-Ay niñita, vas de mal en peor –negó divertido-. Cierra los ojos o voltéate, me cambiaré.
-Bien... -reí bajito.

(..)

-¡¿Cómo me veo?!
-¡Brillante! Es un sí seguro –sonreí, mientras me levantaba para abrazarlo-. Impresiónalo, y cuando llegues a tu casa me llamas y me cuentas todo ¿Sí? No podría aguantar hasta el lunes.
-De acuerdo –sonrió-. ¿Quieres que te acompañe a tu casa?
-No... tranquilo, ve con Matt. Yo regresaré a casa ¿Bien? –Di un último abrazo y le deposité un beso en su mejilla-. Ya verás que todo va a salir perfecto.
-Eso espero... -sonrió de lado-. Nos vemos Annie.

Di la media vuelta hacia el lado contrario a donde él se dirigía. Me sentía feliz por Logan, al fin estaría con la persona que él quiere sin importarle la opinión de los demás. Ahora mi mente se comenzaba a nublar por la visita inesperada de James. Seguía caminando derecho, sin tener idea a donde me dirigía, no conocía para nada aquí. ¿Qué hago?

"¿Puedes venir por mí?" –Le mandé a la única persona que me conocía mucho en este lugar, no precisamente Logan.
"No" –me respondió a los minutos.
"Por favor... estoy perdida."
"No es mi problema"
"Bien, pero sí algo me pasa quedará en tu conciencia"
"¿Dónde estás?"
"No sé"
"¡¿Y cómo demonios esperas que te ayude?!"
"No lo sé, tú conoces más aquí que yo..."
"Dime que ves a tu alrededor"
"Calle Anáhuac, quinto sector. Una tienda a lado de un árbol, un parque... grafitis, y una fuente con un ángel en ella"
"No estás tan lejos, quédate en el parque y no te muevas de ahí, as algo bien por primera vez en tu vida"
"Aquí estaré"

Me dirigí hacia el parque, esperando a James. Me senté en uno de los columpios, observando mis piernas sin ninguna razón al igual también como miraba hacia el frente mientras que unos pequeños jugaban en el resbaladero. Sonreí con tan solo imaginarme qué... así estaba yo hace unos años. Tan feliz... y no atada a un hombre que solamente te quiere para no sentirse solo. Sentí como alguien se sentaba a mi lado, sin hacer ruido. Volteé y lo vi, sin ningún gesto en su rostro.

-Lo siento –susurré, mirando hacia mis zapatos.
-No importa.
-Lo ayudé a verse bien para una cita –me miró, incrédulo.
-¿Qué no puede hacerlo solo?
-A diferencia de muchos hombres, él se preocupa por su aspecto físico.
-De nuevo comparándome con él ¿No te cansas?
-¿Cuándo he dicho eso?
-Lo insinuaste –se levantó-. Ya, vámonos.
-¿Por qué estás tan molesto?
-Siempre hayas la manera de meter a Logan en todo, por eso estoy molesto.
-Eso no es cierto...
-Sí, si lo es.
-¡Mientes! Sin darte cuenta tu eres el paranoico que mete a Logan en todo.
-¿Ahora mi culpa?
-Sí, ahora es tu culpa.
-Increíble –me dijo, subiéndose al auto al igual que yo.
-Déjame en mi casa.
-No me des órdenes.
-Bien.


Through the dark ✓©® Ganadora Watts 2005Donde viven las historias. Descúbrelo ahora