Esa mirada © ➳ Park Jimin || Esa mirada #1

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Demasiadas preguntas pasaban por mi mente. ¿Qué rayos era esa foto? ¿Quién la había enviado? ¿Por qué? Sin embargo, lo que más me preocupaba era el hecho de haber visto a Jimin así con Mandy, Jun Seo y... un arma. ¿Alcohol? Podía soportarlo. ¿Drogas? No tanto. Pero ¿un arma?

¿Qué significaba esto?

Estuve absorta en mis pensamientos durante el camino a casa. Jimin se había ofrecido a traerme para pasar más tiempo juntos, pero no le había dirigido la palabra desde que nos montamos en el auto. Sin duda, no me sentía bien. Al llegar a casa, Jimin me enfrentó.

—¿Te encuentras bien, Young Mi? Te he notado algo rara desde la hora del almuerzo —me dijo, mientras tomaba mis manos entre las suyas. Asentí levemente y me removí un poco en mi asiento.

—Estoy bien, Jimin. Solo estoy algo cansada. Aún no me acostumbro a levantarme temprano, es todo —le respondí con una sonrisa. Jimin arrugó su nariz de forma graciosa y se acercó a mi rostro. Jugó por unos segundos con nuestras narices y me dio un corto beso. Lentamente, se fue apartando y liberó mis manos. Me dedicó una tierna sonrisa y me miró nuevamente.

—¿Por qué eres tan linda?

—¿Por qué eres tan tierno? —Ambos nos observamos fijamente y volvimos a sonreír.

...

Después de nuestra despedida, salí del auto y entré rápidamente a mi hogar. De inmediato, corrí a mi cuarto y me encerré en él, esperando encontrar algo de paz interna para poder asimilar todo lo que había visto antes.

Por alguna extraña razón, no podía dejar de pensar en la foto. Había algo en ella que me hacía sentir ansiosa y me daba un muy mal presentimiento. Revisé mi celular cientos de veces, intentando comprender el porqué de ese mensaje, pero seguía sin obtener una respuesta. De repente, como si alguien hubiese estado escuchando mis dudas internas, mi teléfono empezó a sonar. Un número desconocido apareció en la pantalla. Sin pensarlo dos veces, contesté la llamada y esperé.

—Voy a ser breve con esto, Young Mi. Necesito que me ayudes con algo, pequeña —pronunció una voz masculina.

—¿Quién es? —pregunté algo asustada.

—Lee Jun Seo. Y ahora tú vas a escucharme, ¿te quedó claro? —Asentí rápidamente, como si Jun Seo fuera capaz de verme a través del teléfono—. Apenas termine esta llamada, vas a tomar el sobre que Mandy te dio hace unos días y vas a revisar su contenido. Creo que eso será suficiente para que sepas qué tipo de sujeto es Park Jimin. —Hizo una pausa—. Sin embargo, creo que ya te di un adelanto con la foto que te envié. ¿Qué te pareció, preciosa? —Cuando escuché esto último, todo mi cuerpo se tensó. Había algo en la voz de este chico que me daba escalofríos. Me mantuve en silencio por unos segundos, siendo incapaz de responder. La imagen de esos cuatro chicos seguía siendo desconcertante para mí. Al final, tomé el valor para formular una pregunta.

—¿Q... qué es Bangtan? —Jun Seo rió en voz baja, y los vellos de mis brazos se erizaron en respuesta.

—Nena, eso lo verás en el sobre. ¡Vamos! Ábrelo ya. Te llamaré al rato. —Y así, sin decir más, colgó la llamada. Me quedé observando la pantalla sin saber qué hacer. Poco a poco, me fui acercando hasta mi escritorio para tomar el misterioso sobre. Estaba a punto de tomarlo cuando Thinking Out Loud, el tono de Jimin, empezó a sonar por toda la habitación. Literalmente, salté sobre mi cama para tomar mi celular y contestar la llamada.