Revenge II: Las reglas de lo infinitamente infinito.

Complicaciones

POV Daniel.

—no quiero que te cases con ella—dijo Margaux en cuanto estuvimos fuera.

—no hay nada que hacer ahora que le he recuperado no la dejare ir. —respondo yo ya que en ese aspecto me mostraré inflexible con ella.

—no es buena. ¿cuantas veces estas dispuesto a repetir esto?, —me preguntó seguramente refiriéndose al compromiso.

—¿y tu si eres buena?—pregunté ignorando su pregunta.

—soy lo mejor que tienes. Yo te saqué adelante después de que ella se marchara diciendo al mundo entero que le habías sido infiel. Te conozco y tu no eres así. —intentó tocarme la cara peto me hice hacia atrás asqueado por la sarta de mentiras que de su boca salían. 

—si la engañe—digo porque yo sé que es cierto y no quiero que piense que Emily es la mala del cuento. —y no sabes cuanto me arrepiento,ella es todo lo que yo quiero. Ella es mi mundo. La adoro y no pienso volver a hacer algo estúpido para que se aleje una vez mas.

—si eso es cierto sabes que el que lo hace una,lo hace siempre y no cambiarás. Algo en tu cara me lo dice.—sus palabras fueron como un balde de agua fría pero no tenía razón. Yo quería cambiar por Emily.

—y a mi el que yo siga enamorado de ella y sea la segunda vez que me case con ella me dice algo diferente. —trate de convencerla rápido ya que lo único que deseaba era regresar a la reunión con mi prometida y olvidar de esta escena estúpida.

—y ¿si la otra mujer regresa y pone tu mundo de cabeza otra vez? —esta vez no supe que responder así que me quede un momento pensando mi respuesta.

—entonces tendré que hacer que se vaya. —dije por ultimo.

Eso era cierto. Sarah era diferente en el mal sentido. Era la chica a la que todo hombre tiene como amante pero no como esposa. Y si,a veces ella era capaz de hacerme dudar de lo que sentía por Emily pero ella era la indicada y era la mujer que yo querría para toda la eternidad o al menos eso pensaba en este momento pero seguía sin saber lo que pasaría en el momento en que Sarah volviera a poner un pie cerca de mi.

—bien. Te darás contra el muro tu solo.—respondió cortante y se dio la vuelta para entrar al restaurante de nuevo pero no sin antes mirarme decepcionada y yo me quede ahí un poco más pensando que había hecho para tener a esas dos mujeres tan odiosas en mi vida haciendo mi vida un infierno.

Regrese al restaurante donde mis padres hablaban con Pascal.

—¿en donde esta Em?—pregunté al no verla en la mesa preocupado de que hubiera decidido huir en este momento.

—ha ido al baño,dale espacio, Daniel—dijo mi madre aburrida y sin expresión alguna en su voz.

Al poco rato Emily regreso y tomo asiento junto a mi sonriendo. Todo estaba bien al menos por ahora.

—¿tienen una fecha en mente?—preguntó mi madre y yo puse los ojos en blanco.

Miré a Emily esperando que me dejara escoger la fecha,yo ya tenia todo contemplado y no había mucho tiempo. Ella me sonrió y supe que ella aceptaría lo que yo decidiera

—ocho de agosto. —dije con seguridad ignorando que todos los presentes esperaban mi respuesta. 

—del próximo año ¿no?—dijo Margaux riéndose era una pregunta estúpida teniendo en cuenta que no éramos una pareja que esperara. Sabia que resultaba apresurado pero no quería desperdiciar el tiempo.

—no. Este ocho de agosto. —dije contundente.

—es muy pronto. ¿hay alguna razón por la que una vez más la boda tenga que ser pronto?—pregunto mi madre mirando a Emily.

—no,Victoria, esta vez no.—responde Emily a las acusaciones de mi madre.

—esta vez hemos decidido que haremos todo como corresponde. Primero matrimonio y luego los niños. —dije tomando la mano de Emily quien me sonrió. Amaba hacerla sonreír.

—así es. —apoyó Emily sin perder su sonrisa.

Margaux respondió una llamada y se marchó diciendo que era algo de la oficina.

Luego de dejar todo pagado Em,y yo salimos de ahí y dejamos a mi padre,a Charlotte,a mi madre y a Pascal para que terminaran de cenar.

—no estuvo tan mal esta vez. Aunque tu madre tiene razón. Es muy pronto. ¿solo dos meses?—dijo Emily cuando entramos al coche.

—fue RL día en que te pedí matrimonio después de conocerte, creo que es significativo porque fue él día en que decidimos unir nuestras vidas por primera vez y ya tengo la mitad planeado. Tengo el lugar,la lista de algunas personas que estuvieron en la primera boda,puedes agregar mas,sé que no te gusta que elijan por ti. Solo falta la decoración y el vestido.

—ufff. Otra vez el vestido—dijo ella quejándose; no sabia como había sido aquella vez que elegido su vestimenta para el día de la boda pero notaba en su expresión que no le agradaba la idea de volver a pasar por todo eso.

—Charlotte te ayudará. —le pero mi comentario lejos de tranquilizarla pareció molestarle, recostó su cabeza contra se asiento y se tocó las sienes con ambas manos.

—esta vez no dejare que lo veas hasta que estemos en el altar. — dijo recomponiendose y sonriendo, yo estaba de acuerdo.

—harás feliz a mi madre esta vez—dije yo con ironía recordando todo el drama pasado.

—si pero esto no es por ella,es por nosotros. Y la verdad es que la única manera de hacer feliz a tu madre es que me mandes lejos sin volver a tener contacto conmigo—dijo medio en broma aunque ambos sabíamos que eso era cierto. 

—si. —dije y me abrazó. Nos sentamos en el columpio de su casa a mirar la noche que se reflejaba sobre un mar en calma, era una noche mas que perfecta.

Pero a esa noche tan perfecta le faltaba algo yo sabia lo que quería y moría porque ella también lo quisiera, quería que esta noche acabará de una manera magnífica.