Changing Attitudes [BOOK 2; Drugs & Troubles]

Capitulo 15.-"¿Dónde te llevó Paul?

Capitulo 15.-"¿Dónde te llevó Paul?"

La carretera esta despejada, por el momento somos los únicos en la pista rápida. No he dicho ninguna palabra, mi nerviosismo se ha acoplado al auto, y Justin lo ha notado. Su mano se poso sobre la mía tratando de dame algo de calma.

Luego de conducir un buen tramo, quite mi mano de la suya y presione la guantera. Una cajetilla de cigarrillos abierta es lo único que hay dentro. Justin observa con su ceño fruncido, pero no dice nada. Con cuidado de no quitar la vista del camino, tomo un cigarrillo, disminuyo la velocidad y saco un encendedor del bolsillo de mi poleron. Enciendo el cigarrillo y le doy una calada, espero unos segundos y dejo ir el humo.

-No sabia que..

-No lo hacía.

Silencio.

Avanzamos un poco mas y me detengo en una gasolinera. Esa que tan bien conozco. Esa donde el señor James suele obsequiarme alguna golosina luego de comprar un par de cervezas.
Dejo escapar un gran suspiro. Bajo la ventanilla del conductor para que el humo se disipe.

Aún con el cigarrillo entre los dedos, digo -: Este es uno de los lugares que quería enseñarte. Debes de preguntarte porqué aquí. La verdad es que un día, simplemente quise escapar. Necesitaba salir de allí. Todo me recordaba a ti. La habitación era demasiado grande. O quizá solo faltabas tú para completarla. -Fumé el cigarrillo hasta acabarlo y tirar la colilla por la ventana. -Me detuve aquí porque necesitaba tomar algo. Y no me refiero a una gaseosa o un jugo. Pensé que sería momentáneo, que después de tomar aire fresco, se pasaría. Me equivoqué. -Desabroché mi cinturón y le sonreí. Él me miraba atento, en silencio. -Espérame aquí.

Me bajé del Ferrari no sin antes mirar al copiloto y sonreírle. Empuje la puerta de cristal, recibiendo el tintineo de una campanilla. Mi camino siempre era el mismo. Un pasillo a la derecha, luego otro a la izquierda y por ultimo, caminar hasta el fondo. Los refrigeradores repletos de bebidas alcohólicas me daban la bienvenida. Tome el pomo y lo tiré. Me detuve por un segundo a pensar en que quería esta vez. Si cerveza en lata, o en botella. La primera fue la mejor opción. Cuatro latas de cerveza barata fue lo que deje sobre el mostrador. El señor James, dueño del local, me sonrió. Nunca nos dirigimos palabra alguna. Solo gestos rápidos. Le tendí el dinero, lo contó, lo guardo en la caja registradora y me miró. Se puso de pie, tomó una bolsa de Doritos mediana y me la entregó. Le sonreí, tome mis cosas y salí.
Me subí al auto con cuidado de no dejar caer nada y me acomodé. Le pase una cerveza a Justin y me deje las demás en el regazo.

-No pensaba gastar dinero en cerveza, y por ese motivo compre esta mierda. Era de las mas económicas, pero de todos modos me quito la ansiedad que tenía por beber. Vine aquí casi todos los días desde el accidente. Siempre lo mismo, compraba un par de cervezas, una cajetilla de diez cigarrillos, y luego me iba. Tenía pesadillas, o simplemente no podía dormir. Despertaba asustada, y con ansiedad. Mucha ansiedad.

"No debes enfadarte con Paul, pero él me llevó a un sitio. Te llevaré, lo prometo. Pero primero, deja disfrutar de esto. Disfrutar el hecho que ya te tengo conmigo, y que quizá ya no deba regresar a este horrible lugar."

-Tranquila. A pesar de ser cerveza barata, no esta nada mal.

-Al principio era asquerosa, luego le he tomado el gusto. -Le sonreí y me acerqué a él, besé la comisura de sus labios y lamí encima de ellos para sacar el exceso de cerveza.

-¿Dónde te llevó Paul?-Su mirada es dura y acusadora.

-Ya lo verás. No quería hacerlo, pero lo he obligado. Y sabes lo obstinada que puedo ser.

-Tienes razón. -Su mirada se suaviza y me da una pequeña sonrisa, deja la lata de cerveza en el posa vasos, y toma mi cara entre sus manos. Me da pequeños besos en los labios y luego los convierte en algo intenso. -Gracias por enseñarme esto.