Changing Attitudes [BOOK 2; Drugs & Troubles]

Capitulo 21.-"¿La demente soy yo?"

Capitulo 21.-"¿La demente soy yo?"

El trayecto a casa fue mas lento de lo que hubiese querido. Me dolía la cabeza, y mi estomago gruñía, aunque las ganas de comer no estaban presentes.

Todo era un completo lio en mi cabeza. No tenia la menor idea de que hacer. Quizá todo esto era una vil mentira de Douglas. ¿Porqué no recordaba nada de aquella noche? ¿Tanto había bebido?

Lo único que puedo recordar es haber subido al auto, luego llegar a su edificio y...nada. Absolutamente nada mas.

No sé que hicimos aquella noche. Temo por el hecho de haber cometido mas de una estupidez aquel día. Y si Douglas va y le dice todo a Justin, si le dice la verdad, no podre ni siquiera corroborar la historia. Eso era lo que mas temía. Todo estaba en mi contra. Estaba completamente jodida.

Detengo el taxi a pasos de una pizzeria. Le pago al chófer y me despido con una sonrisa no muy convincente.

La campanilla de la entrada resuena por todo el local. Algunos padres comparten una pizza familiar con sus hijos. Otros chicos, cansados de patinar, ríen y mastican la deliciosa masa horneada que tienen en frente.

Me dirijo al mesón de atención, y veo los diferentes tipos de agregados. Un chico, de no mas de veinte años, me saluda. Lleva el uniforme del local. Un pantalón de tela negro, una camisa blanca con mangas hasta los codos, y un delantal rojo que lleva una pequeña placa con su nombre.

No lo leo.

-¿Deseas ordenar? -Me pregunta.

-Si. Estaba eligiendo los ingredientes. -Me regala otra sonrisa. Su cabello es negro como el carbón. Y sus ojos negros como la noche. Algunas pecas habitan sus mejillas pálidas, y sus brazos delgados son algo largos para su estatura, que no ha de ser mas del metro setenta.

-Mi caja esta abierta. Mis compañeros están en hora de colación. Solo somos el pizzero, y yo. Y claro, un montón de ingredientes para pizzas. -Vuelve a sonreír. No sé si se deba a que su trabajo le exige que sea así de agradable, o si realmente lo es. Aunque optaría por la segunda. Parece un chico simpático. Me rio. Me ha causado gracia, y necesitaba pensar en otra cosa.

-Ya se lo que quiero. -Me acerco a una de las cajas, el chico pasa por detrás del mesón y presiona algunos botones.

-¿Tamaño? ¿Extra grande, familiar, mediana, personal?

-Mediana. -Asiente para si mismo.

-¿Ingredientes?

-Piña, carne, pollo. ¿Puede ser extra queso?

-Se ordena un super extra queso para la señorita. -Presiona unos cuantos botones mas y me sonríe. -¿Bebida, o jugo?

-Coca Cola.

-¿Para servir o llevar?

-Llevar.

-¿Alguna otra cosa? -Niego.

Me dice el monto, saco un billete de mi bolsillo y se lo doy. Me da el cambio y saca una gorra del mueble que tiene a su izquierda. Se la lleva a la cabeza, y oculta su cabello. La maquina imprime mi boleta, y me lo entrega.

-Su orden esta siendo preparada. No hay mucha gente hoy, y no hay ningún pedido en cola, así que estará listo en unos minutos. -Le sonrío y me siento a unas cuantas mesas.

Después de esperar no mas de diez minutos, el chico me hace una seña. Me acerco al mesón. Me entrega una caja, el olor es embriagador, mi estomago gruñe en cuanto mis fosas nasales huelen aquel aroma. Tomo la caja de pizza con una mano, y con la otra, tomo una bolsa que contiene mi vaso de bebida. La bolsa es transparente, y no es solo la bebida lo que va allí.